Esta semana os traemos, un poco más tarde de lo habitual, la reseña de una de las mejores novelas de Ciencia Ficción publicada en España el pasado año 2011: “La chica mecánica” del estadounidense Paolo Bacigalupi.
La chica mecánica
Paolo Bacigalupi
Editorial: PLAZA & JANÉS
Colección: EXITOS
Edición: tapa dura con sobrecubierta
ISBN: 9788401339400
544 páginas
Ganadora de los premios Hugo, Nébula, Locus, John W. Campbell Memorial en 2010 y el premio de los libreros independientes de Estados Unidos en 2011, solo con esa presentación ya te hace pensar que estamos ante una novela que cuando menos merece la pena leer.
Ambientada en Tailandia en el siglo XXII, la humanidad ha esquilmado las reservas de combustibles fósiles, donde la energía es uno de los bienes más preciados, nada se destruye, todo se reutiliza y reaprovecha hasta lo máximo con el fin de no desperdiciar ni un ápice de energía. Los países están en manos de megacorporaciones alimenticias que controlan la producción de alimentos mundial con plantas y animales transgénicos, los medios de transporte se han vuelto de lo más rudimentario, volviendo a la tracción animal en muchos casos, la población malvive amontonada en los restos de lo que se ha dado en llamar La Gran Expansión, o en barrios de chabolas que florecen como setas por todos lados junto a las ciudades para dar cabida a la creciente población que emigra a ellas movidos por diferentes guerras fronterizas, plagas, etc.
Como hemos dicho la acción se desarrolla en Tailandia, que ha conseguido resistir a los emvites de las diferentes catástrofes que asolan el planeta gracias a cerrarse casi completamente a los extranjeros y sus influencias, y a que, no se sabe como, han conseguido desarrollar la tecnología necesaria para producir sus propios alimentos sin necesidad de recurrir a los grandes productores de transgénicos.
En esta amalgama de circunstancias nos encontramos con Anderson Lake, agente encubierto de una de las multinacionales productoras de alimentos que consigue un visado de residencia y trabajo en el país como director de una empresa de producción de muelles percutores, que es una de las formas en las que pueden almacenar la energía en este momento.
Desde el primer momento el autor nos deja claro la importancia capital que tienen los alimentos en la historia, la presentación de Anderson es en un mercado tradicional tailadés donde descubre una fruta desconocida, lo que tras algunas investigaciones destapará la posibilidad de producción del país de producción de sus propios alimentos, no solo de piratear los ya existentes. El orígen de esta fruta dara lugar a una de las principales lineas argumentales de la historia, pues gracias a ella nos explican la existencia de estos piratas genéticos y sus creaciones, desde gatos “camaleones” llamados chesires en honor al gato de Alicia en el país de las maravillas, hasta chicas mecánicas, humanos creados en laboratorio para servir como mano de obra barata y altamente cualificada, soldados, criados, etc.
Por otro lado tenemos a Hock Seng, un inmigrante chino, secretario de Anderson en la fábrica que es el encargado de que los números cuadren para que no cierren la empresa y verse en la calle. Este es uno de los personajes más importantes de la historia, no solo por su historia personal, que descubriremos a medida que la novela se va desarrollando, si no porque a través de él Bacigalupi nos muestra el gran contraste cultural que hay en el país, no solo entre tailandeses y occidentales, si no también entre asiáticos de diferentes países, pues los chinos son exiliados de países fronterizos, supervivientes de una guerra religiosa que malviven en torres donde no aspiran a nada mayor que un trabajo como conductor de bici-taxi o algo similar.
La novela es un thriller de investigación con funcionarios corruptos, piratas genéticos, neo-seres, exiliados que lucha por sobrevivir, mezclado con un ambiente asfixiante, húmedo y caluroso, que raya el stemapunk en muchos aspectos, que te engancha casi desde el principio por su originalidad y frescura. Llena de personajes muy bien construidos, muy sólidos, con los que el lector se siente identificado en algunos momentos.
Sin dudarlo una muy buena recomendación desde Librohoy, que cautivara tanto a los lectores asiduos al género como a los que quieran leer una buena novela, puedes recomendarla a cualquiera sin miedo a fallar, lo que hace de ella una novela grande, quizás un poco sobrevalorada a la hora de otorgarle premios, pero muy muy recomendable.