Este libro ha sido mi primer contacto con la autora. Tenía muchísimas ganas de leer algo suyo. Cuando se publicó Mi isla me encapriché con dicho libro. Era casi una obsesión, deseaba leerlo a toda costa. Al final se me presentó la oportunidad de leer La magia de ser Sofía y, aunque no fuese el que tenía en mente, dije: "¿por qué no?"
Sofía trabaja allí como camarera y es feliz.
Sofía no tiene pareja y tampoco la busca, aunque desearía encontrar la magia.
Sofía experimenta un chispazo cuando él cruza por primera vez la puerta.
Él aparece por casualidad guiado por el aroma de las partículas de café…
…o tal vez por el destino.
Él se llama Héctor y está a punto de descubrir dónde reside la magia.
La narración es en primera persona, a dos voces: la de Sofía y la de Héctor, aunque la mayoría de los capítulos vienen narrados por ella. Elísabet emplea un estilo sencillo, directo, sin andarse por las ramas.
La escritora juega mucho con personajes secundarios. A pesar de que los protagonistas son Sofía y Héctor la historia se apoya en otros personajes que condicionan los giros de la trama. He de decir que disfruté con estos personajes, le aportan más cuerpo a la historia, tanto para lo bueno como para lo malo. Y algunos son tan importantes que hasta vamos sabiendo su historia en capítulos dedicados a ellos exclusivamente, narrados por Sofía.–¿Por qué no me pones una de tus canciones bonitas? A lo mejor así te cuento sin que me dé vergüenza que lo mejor de estar contigo es que no me angustia nada.–¿Y qué pasa cuando no estoy?–Que la vida vuelve a ser un coñazo.–Pág. 234–La historia me ha gustado, porque decir lo contrario sería mentir. Aún así, creo que hay muchas repeticiones. Me explico. Los protagonistas dudan y reflexionan, esas dudas y reflexiones son continuas y siempre las mismas. En cierto punto leer tantas páginas para descubrir lo que ya sabías resulta un poco cansino. Por otro lado, el final ha sido más de lo mismo, desbordante de dañinas dudas. Ya sabía que iba a ser abierto, pero no me lo esperaba TAN abierto. Con total sinceridad, si leo La magia de ser nosotros será por la curiosidad que me ha picado este desenlace.Concluyendo, La magia de ser Sofía es una historia de amor y desamor, de dudas razonables sobre el futuro y el pasado. Respecto a lo que yo he leído, pues me falta la segunda parte, opino que podrían haberse acortado muchas páginas, en lo que refiere, por ejemplo, a todos esos miedos y temores por lo erróneo; y ampliarse en otros aspectos, como en el papel de algunos personajes secundarios.