Esta es la historia de cuatro personajes completamente opuestos entre sí con vidas diferentes, convocados a una partida de póquer por medio de un sobre negro con bordes blancos. Este juego es con el fin de darles una segunda oportunidad y que se jueguen su vida, literalmente.
Con los personajes estoy un poco confundida de qué pensar, porque por una parte te cuenta sus vidas, pero no llega a profundizar del todo. Es decir, el autor solo te narra lo necesario para que sepas del porqué están ahí. No te lo dice desde el principio, sino que vas averiguandolo poco a poco, que es algo que me gusta y me sorprendió. Aunque al principio vemos el punto de vista de estos personajes viendo las diferentes escenas de cómo reciben el sobre, la historia es narrada por un solo personaje, Álvaro. Y, aunque estés en su mente, y sabes cómo piensa, te vas enterando de su vida a medida que va interactuando con los otros personajes.
Por otra parte, la forma de narrar no me pareció una cosa de otro mundo. Es bastante fácil de seguir, aunque algunas palabras se vean un poco rebuscadas. Con solo 141 páginas, el autor logra atraparte en este mundo un poco loco, ya que solo esperaba suspenso, pero tiene unos pequeños toques paranormales que no esperaba.
En resumen, La Última Jugada es un libro sencillo, que te lees en una tarde. Si te gusta el suspenso, este libro te va a gustar. Y te deja pensando que las apariencias pueden engañar.
Ya saben, solo le dan click a la imagen.
¡Saludos!