A partir de ahora los Viernes románticos pasan a ser cada dos semanas. El motivo es que, como he decidido subir menos entradas semanales, se me están acumulando las reseñas. Además así dejo libre al menos un viernes de cada dos para subir entradas que me apetezcan.Dicho esto, os dejo con una nueva reseña. ¡Buen viernes!
Escarlata Ediciones || Noviembre 2016
310 páginas || Papel y ebook
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Hace cientos de años, la congregación Espúrea ascendió al poder. Obtenía su magia de las cenizas y su ambición fue tal que, finalmente, abrasó el mundo. Después de los grandes incendios y de los cataclismos ocasionados por aquel desastre, los supervivientes se escondieron en lo poco que se mantuvo en pie.
Aline lleva encerrada en los últimos vestigios de la civilización desde que perdió la última de sus batallas como capitana del ejército. Dejó la lucha por la política y pasó a formar parte del consejo, una institución que trata de impedir que los suyos sucumban a un mundo reducido al polvo.
Con la llegada de Weiss, un antiguo compañero de la milicia, Aline recibe un mensaje póstumo de su tío: unas coordenadas que esconden un secreto que bien podría salvar lo que queda o, por el contrario, destruirlo todo. Aline no tendrá más remedio que emprender un viaje lleno de peligros con la persona que había decidido dejar atrás, y cruzar un territorio dominado por las mortíferas tribus del fuego.
Aline fue la capitana del ejército durante mucho tiempo, hasta que un hecho desastroso la obligó a cambiar el rumbo de su vida, y decidió internarse en la política y ser parte del consejo de su pueblo. Weiss fue uno de sus compañeros, y el testigo del momento en el que la vida de ella cambió por completo, sintiéndose siempre culpable de lo sucedido. Desde entonces, de decidió a viajar, incapaz de sentirse preso entre las paredes del pueblo, y al volver, únicamente lo hace para darle un mensaje a Aline de su tio Cobalt, que falleció justo después de entregárselo. Dicho mensaje son unas coordenadas, de un lugar más allá del lugar donde se ocultan las tribus del fuego, y será ella la que deba decidir si quiere dejarlo todo y vivir una nueva aventura, junto al que fue su gran amigo, o mantenerse segura y aislada en el pueblo. ¿Cuá será su decisión?¿Seguirá el mensaje de alguien que hace tanto tiempo que no ve, y que no sentía como su familia?
No quiero ser un hueco vacío en tu vida, Aline. No quiero ser el recuerdo que duele y no quiero dejar de existir excepto cuando arde esa idea.'Las cenizas que quedan' es un libro original. Esa es la palabra en la que piensas cuando lo lees, y es que al menos yo, nunca había leido nada parecido. La historia que nos muestra es tan diferente a todo lo demás, tan increible, tan bien hilada y tan bien pensada, que te deja con la boca abierta cuando la conoces, o casi. Es una historia llena de magia, pero de una magia totalmente diferente a la típica que ya tanto conocemos, y que se basa en algo que proviene de la naturaleza como el fuego, y las cenizas que quedan cuando este se extingue. Es un libro que nos habla del ansía de poder de unos pocos, y de como acabaron con el mundo que conocíamos por ello. Algo que bien podría ocurrir, sin magia, pero con el mismo afán de obtener y obtener de la naturaleza, y desgastarla por el camino.
Los personajes de esta historia son muy fuertes y carismáticos. Los secundarios son importantes, pero sin duda los dos principales, son de lo mejor que tiene el libro, junto a la historia en si. Aline es una chica atormenatada, que tuvo que dejar todo lo que la hacía feliz, y la hacía sentirse útil, para ocupar una silla en un consejo donde no quiere estar. Weiss por otro lado, es arrogante, muy sincero y directo, pero la culpabilidad por lo ocurrido puede con él y es incapaz de recuperar la relación que ambos tenían. Una relación que yo pensaba que iba a ir por un camino por el que no va, y sé que eso os gustará a muchos.
Y cuando se unen a Grace, ya forman un trio maravilloso. Y es que ella es un personaje que a mi me ha conquistado, aunque al principio fuera todo lo contrario.
Ambos son personajes complejos, que esconden más de lo que puede aparentar a simple vista, y en el caso de ella, hay que empatizar con su situación y sus sentimientos para comprenderla, y aceptarla. Porque si, a mi a veces me ha sacado de mis casillas, y he tenido que pensar "es normal, mira todo lo que ha pasado" para aceptar esa manera brusca de ser. Un personaje que me ha recordado muchísimo a Imperator Furiosa, de Mad Max, pero no por la historia del libro, como pueden pensar algunos, sino por su carácter y su físico.
El libro está escrito en tercera persona, conociendo los puntos de vista de Aline y Weiss en todo momento. Aunque ambos interaccionan a lo largo de los capítulos, siempre notamos que uno de los dos es el protagonista y el que centra la atención de los hechos, y los sentimientos. En todo momento conocemos lo que piensan y lo que sienten, ya sea por cómo va transcurriendo su aventura, o por los momentos en los que conocemos lo que ocurrió en el pasado.
Es un libro con un final cerrado, pero que daría para mucho más si la autora quisiera. No porque la el mundo que ha creado es tan rico, y tan maravilloso, que al menos yo estaría encantada de saber más de él. El final es sorprendente, o al menos a mi me lo ha parecido. Y totalmente diferente a como pensaba que iba a acabar cuando lo empecé, y eso, no siempre ocurre, y cuando pasa, te deja con una sensación increible en el cuerpo. Y maravillosa. Y si, puede que otro final me hubiera gustado más, o no, no lo sé. Porque si lo pienso es perfecto, pero perfecto sería también que acabara de otra forma. No sé si me explico.
historia tenga la necesidad de continuar, sino porque
En resumen, 'Las cenizas que quedan' es un libro de fantasía, en un mundo post-apocalíptico, lleno de una magia diferente, y con unos personajes fuertes y complejos, que vivirán una aventura que les hará resurgir de sus cenizas, y olvidar el pasado. Juntos deberán pasar página, y encontrar aquello que buscan, y que cambiará sus vidas para siempre. Un libro con una narración maravillosa y una historia increiblemente original.
El fuego que ya no se tiene es el que duele.