PorPedro Villar Sánchez
Con una edición cuidada e impecable nos presenta la editorial leonesa Amigos de Papel un álbum que se hace imprescindible con los versos de Carlos Blanco y las ilustraciones de Daniel Montero.
Con títulos, entre otros, como Queda la música de Antonio García Teijeiro y Tesa González, Mamá me grita de Alberto Sobrino o La bruja Piruja, la editorial se afianza en el panorama editorial del álbum ilustrado en España como una de las más interesantes y creativas, armonizando de manera ejemplar texto, ilustración y diseño. Amigos de Papel mantiene un entusiasmo digno de admirar por la literatura infantil y realizan presentaciones por toda nuestra geografía. A todo ello se une la valía humana y profesional de Asunción Carracedo y de Eugenio Castro que conjugan de una manera admirable en su catálogo nombres consolidados con otros menos conocidos pero no exentos de calidad.Carlos Blanco, a quien ya conocíamos por libros tan emblemáticos como El cocodrilo Cirilo (Escuela Española, 1986), como buen escritor y maestro es conocedor de nuestra tradición oral y así retoma la figura de la bruja piruja del imaginario colectivo espanta niños que asusta a los pequeños para que se vayan a la cama sin protestar. Diversos son los cuentos que se han escrito a partir de la figura brujil, pero este libro tiene peculiaridades que lo hacen especial. Narra una imaginativa historia escrita en verso y dramatizada, dando pie a los diversos personajes como el narrador, la bruja, el cuervo y el sapo, que recorren el libro de una manera divertida con un ritmo narrativo y poético intenso. Las ilustraciones de Daniel Montero, al igual que los textos, son de una gran calidad, tienen la virtud de amplificar el texto, redimensionan la narración y mantienen una relación equilibrada. Un libro redondo en definitiva para disfrutar al máximo, donde leer, mirar y poder disfrutar de la magia del teatro resulta un auténtico disfrute.