LA REINA DEL CEMENTERIO #3: EL PROFETA
«Ha llegado la hora de la verdad: necesito que encuentres a mi asesino. Todas las piezas empiezan a encajar y tienes que descubrir al responsable.»
Amelia ha regresado a Charleston después de habérselas visto con la muerte en Asher Falls. Se ha dado cuenta de que romper las reglas que su padre le impuso supone pagar un precio muy alto, y que podría tener consecuencias incontrolables.
Su mayor problema ahora es mantenerse alejada de John Devlin, un hombre que la fascina y aterra a partes iguales. Aunque sus sentimientos por él son innegables, no puede tenerle cerca mientras sigan acechándolo los fantasmas de su esposa e hija.
Sin embargo, Amelia pronto se dará cuenta de que ella tiene un problema mucho mayor: esta vez hay un fantasma que la acecha a ella. El fallecido oficial de policía Robert Freemon, a quien asesinaron con un tiro por la espalda, le pide ayuda para encontrar a su asesino….
3. El profeta
4. The visitor
5. The sinner
The abandoned (precuela)
ENLACES DE INTERÉS:Web de la autora
Blog La reina del cementerio
OPINIÓN PERSONAL:En esta tercera novela, acompañamos a nuestra particular Reina del cementerio de regreso a Charleston, donde intenta dejar atrás Asher Falls y todo cuanto aconteció allí.
Solo Angus ha venido con ella, ese perro al que salvó de una muerte segura. Bueno, se ha traído consigo al peludo Angus y un legado que no puede ignorar, pero el cual decide aparcar a un lado.
Hace tiempo que no ve al detective Devlin, ese hombre misterioso que le acelera las pulsaciones y por el que rompió las reglas que su padre le inculcó de pequeña. Ahora, y por culpa de ese quebrantamiento, Amelia interacúa con algunos fantasmas, dos de los cuales buscan su ayuda desesperadamente.
El Profeta no descansará hasta que la identidad de su asesino (o asesina) sea revelado. La muerte le dio unos conocimientos, pero todo lo relacionado con su fallecimiento...está envuelto en una neblina. Solo conserva un vago recuerdo, el de un intenso perfume...
Amelia regresa a las andadas y se pone manos a la obra en el cementerio local, ese mismo en el que meses atrás descubrieron varios cadáveres y ella pasó por un infierno. Entre jornada de trabajo y paseos a media tarde, investiga para ayudar al Profeta a hallar la paz, pero algo oscuro ha llegado a la ciudad, alguien a quien muchos temen y otros ni siquiera mentan. Y ahora, más que nunca, hay secretos que esperan a ser desvelados.En esta tercera entrega de la saga, los elementos sobrenaturales tienen mucho peso y las escenas oníricas se mezclan con la realidad, envolviéndonos en una historia repleta de suspense con algunas dosis de romance y una pizca de terror.
La pluma de la autora destaca, como ya dije en reseñas anteriores, por sus descripciones, que nos invitan a viajar hasta la ciudad de Charleston y visitar sus calles salpicadas de edificios victorianos y jardines privados. Amanda Stevens es toda una entendida en botánica, o eso parece por la cantidad de detalles que nos ofrece de la vegetación local.
El personaje de Amelia ha sufrido un cambio. Lo sucedido en Asher Falls le ha afectado notablemente y ella intenta por todos los medios huir de aquello refugiándose en el trabajo y, por qué no, en los brazos de Devlin. La razón le dice que se haga a un lado, pero no puede luchar contra la irremediable atracción y la maraña de sentimientos que despiertan en ella ese hombre acechado por sus fantasmas y que esconde más de un secreto...
Nuevamente tenemos secundarios que brillan con luz propia hasta casi eclipsar a la protagonista, como las hermanas Perilloux (la magnética Isabel y la dulce Clementine) o la inquietante y pequeña Shani, cuyo fantasma reclama la atención de nuestra restauradora con alma de detective. Pero Mariama se lleva la mención de honor, esa entidad omnipresente, que si no está en espíritu, intoxica cada escena con su simple recuerdo. Odia a Amelia y lo que ella representa. Esa mujer de exóticas facciones era fiera en vida y es peligrosa en muerte...
El final es sorprendente. Varios giros inesperados nos sacuden, dejándonos con un nudo en el estómago...
La novela es, en definitiva, otro capítulo más en la historia de Amelia, que cierra un episodio, pero deja varios cabos sueltos que irán entrelazándose en las siguentes entregas.
El ritmo sufre altibajos. Más que altibajos, yo diría que se reiteran acciones banales como cuando va a trabajar, vuelve, saca al perro, pero a su vez eso otorga un realismo a la historia que hace que nos imbuyamos con más facilidad en ella.
Recomendada para los seguidores de La reina del cementerio y aquellos que disfruten con las novelas de suspense que ofrecen algo más.
Lo mejor: Angus (es que me encantan los animales) y todo el misticismo alrededor del personaje de Darius.
Lo peor: Momentos en los que sentía que vivía el día de la marmota.VALORACIÓN: