Reseña: 'Los ojos amarillos de los cocodrilos'

Por Yaneth @MyPointsOfView_

Continuamos con las trilogías, aunque esta vez nos pasamos al género de la narrativa. "Los Ojos Amarillos De Los Cocodrilos" de Katherine Pancol es el primer libro de dicha trilogía, le siguen "El Vals Lento De Las Tortugas" y "Las Ardillas De Central Park Están Tristes Los Lunes", títulos que por su originalidad ya llaman la atención.Lo extraño del título te descoloca al comenzar a leer el libro, pues no sabes bien con qué te vas a encontrar. La puesta en escena de los personajes es bastante lenta y cuesta un poco, al comienzo, situarlos a todos en un contexto interesante. Luego te das cuenta de que la autora se está tomando su tiempo para perfilar muy bien a los personajes, haciendo que poco a poco sean parte del lector. Esto último es un gran logro porque los caracteres de los personajes están tan definidos que es poco probable, aunque parezca lo contrario, que muchos lectores se sientan identificados con lo cual el mérito es inmenso. Resulta muy real el hecho de que te puedas identificar con unos aspectos de una persona y no con otros. Por un lado encontraremos, personajes que se superan, que se esfuerzan y consiguen vencer los obstáculos que les tenían paralizados. Y por otro, hay personajes que se pierden en su oscuridad, que se lastiman cada vez mas. Sigues sus vidas, sus emociones. Los detalles y las descripciones no son tan importantes como lo son los sentimientos.

La protagonista principal es Joséphine, una mujer encerrada aún en su caparazón y que se ve forzada por las circunstancias a enfrentarse a la vida, a vivir. Con ella vamos a vivir sus traumas, sus dudas, sus miedos y su superación. He querido rescatar un fragmento de sus momentos mas bajos, con pensamientos tan propios de muchas mujeres que se han visto de repente solas, sin su pareja o sin alguien detrás de quien "esconderse";

"-Tengo miedo, tengo miedo de todo, soy una montaña de miedo... Me gustaría morir, aquí, ahora, y no tener que ocuparme de nada nunca más....-Tengo miedo de no conseguirlo, tengo miedo de terminar debajo de un puente, de ser desahuciada, tengo miedo de no volver a amar, tengo miedo de perder mi trabajo, tengo miedo de que se me acaben las ideas para siempree, tengo miedo de envejecer, tengo miedo de engordar, tengo miedo de morir sola tengo miedo de no volver a reír, tengo miedo del cáncer de mama, tengo miedo del mañana..."


Luego, descubre que también ella sabe vivir, y es así como lo expresa:

"-Sobre todo, Shirley, ya no tengo miedo. Antes tenía miedo de todo. Me escondía detrás de Antoine. Detrás de mi tesis. Detrás de mi sombra. Hoy me permito cosas que antes me prohibía, subo más a la red....-Sólo necesito ser paciente, dejar que la nueva Jo crezca y, un día, lo invadirá todo, me dará toda su fuerza. Por el momento estoy aprendiendo... He comprendido que la felicidad no es vivir una pequeña vida sin embrollos, sin cometer errores ni moverse. La felicidad es aceptar la lucha, el esfuerzo, la duda y avanzar, avanzar franqueando cada obstáculo. Antes no avanzaba, dormía. Me dejaba llevar por una rutina tranquila: mi marido, mis hijas mis estudios, mi comodidad. Ahora he aprendido a luchar, a encontrar soluciones, desesperar un momento para rehacerme después y avanzar, Shirley. ¡Sola! Me las arreglo."

"Los Ojos Amarillos De Los Cocodrilos" te engancha lentamente, no es de los libros que consumes en dos días sino poco a poco, racionando, sin prisas. Son muchos los personajes y en todos ellos ahondamos descubriendo la explicación de sus actos y de sus formas de ser. Quizás éste sea el motivo por el que a la historia en sí le falte algo y la resolución de ella sea muchas veces previsible. Es muy moralista, del tipo "según lo que siembres, recogerás", y existen muy pocas sorpresas, por no decir ninguna, precisamente debido a este carácter moral. Katherine Pancol define muy bien el estilo que ha impregnado en sus libros y es que: "Son los personajes los que deciden".