ELÍSABET BENAVENT
Suma de Letras · 21 Enero 2016 · Contemporáneo · 1º Horizonte Martina
Original, arriesgada, arrebatadora, desternillante, hípster, macarra, sexy, 100% @BetaCoqueta, Martina con vistas al mar te enloquecerá.
Si te llamas Martina, llevas siempre la melena recogida, eres absolutamente cerebral...
Si te has formado para ser chef y perteneces al equipo de El Mar...
Si has sentido un chispazo al conocer a tu jefe, Pablo Ruiz, excéntrico cocinero con estrella...
Si no soportas su indumentaria hipster, pero te irías a cualquier parte si él te lo pidiera..
Eres sin dudarlo la protagonista de esta historia...
Y tu vida, tan ordenada, está a punto de cambiar.
Después del éxito de las sagas Valeria, Silvia y de la trilogía Mi elección, con más de 400.000 ejemplares vendidos, Elísabet Benavent regresa a la ficción con una historia de amor irrefrenable, súbita, auténtica, un binomio eléctrico, una combinación explosiva que demuestra que en cuestión de amor no se puede negar la evidencia y que no depende de nosotros a quien amar. Martina con vistas al mar es la primera parte de Horizonte Martina, una mezcla de cocina, pasión, sexo y carcajadas, una bilogía llena de sorpresas que te hará vivir momentos únicos y que te conquistará para siempre. Placer para los sentidos.
Hace tiempo que deseaba leer alguna novela de Elísabet Benavent, una autora que lleva ya algún tiempo cosechando muy buenas críticas, pues bien, por fin he tenido la oportunidad de iniciarme en su pluma con Martina con vistas al mar , la primera parte de la bilogía Horizonte Martina, y no puedo estar más contenta con el resultado. La novela me ha enganchado a una historia maravillosa con romances intensos, pasiones desmedidas y personajes reales como la vida misma que aprenderán que el amor no se planea, solo hay que esperar a que llegue, aunque cuando lo haga sea en la persona menos adecuada.
Martina es una mujer de treinta y un años que siempre ha tenido claro lo que quería hacer con su vida. Desde muy joven su sueño era ser chef, uno que se codeara con los mejores de la profesión. Ella lo ha dado todo por alcanzar su meta, se ha formado y ha trabajado duro para conseguirlo. No obstante, su gran oportunidad le va a llegar de la mano del famoso Pablo Ruiz, un excéntrico y afamado cocinero que le ofrece la posibilidad de unirse al equipo de El Mar, el restaurante que dirige el mismo y que está haciendo furor en Madrid. Pues bien, la vida tan ordenada que Martina había planificado está a punto de cambiar, ahora, no solo tiene que compartir piso con dos locas que resultan ser sus mejores amigas, también debe lidiar con los sentimientos que su nuevo jefe despierta en ella. Con su indumentaria hipster y derrochando atractivo sexual no puede ser menos su tipo, pero no puede evitar sentir emociones que escapan a su control y que están transformando a la persona que era en alguien distinto, más valiente, arriesgada y que quiere disfrutar de la vida sin límites.
Pablo no es de esas personas que vive la vida a medias, él disfruta intensamente de cada momento como si fuera el último. Esta filosofía le había llevado a cometer errores que había marcado su pasado y su presente. Ahora es el chef de El Mar, en el ha puesto toda su pasión y esas ganas de recuperar la tranquilidad que se le va de las manos cuando sus fantasmas y la oscuridad que tiene dentro hacen aparición, por lo que cuando ve a Martina por primera vez en su cocina sabe que esta chica, con su rigidez y esa forma de ser tan cuadriculada, le va a trastocar su ya desequilibrada existencia. Desde el principio la desea, quiere que esos bellos ojos brillen de lujuria y que cada centímetro de su cuerpo pierda el control. No obstante, meter a Martina en su vida no le parece la mejor idea, ella no tiene por qué verse salpicada por sus problemas, pero, como siempre, sus emociones van a ganar la batalla a la razón, ya que hará todo lo posible por acercarse a ella y demostrarle que la vida hay que sentirla y disfrutarla a pesar de las consecuencias.
La atracción entre Martina y Pablo dará como resultado un tira y afloja donde ambos desean más que una simple relación de amistad. Los sentimientos que experimentan juntos son explosivos, pero dejarse llevar por ellos puede interferir en su trabajo. Sin embargo, no pueden poner barreras a las emociones y cuando decidan arriesgarse a vivirlas intensamente, lo que en principio comenzó como sexo entre dos personas que querían divertirse, acabará en una historia de amor irrefrenable que los cambiará para siempre. Aprenderán el uno del otro que eso que sienten los hace únicos y especiales. Martina, esa mujer fuerte y decidida, abrirá su corazón para amar a un hombre que la hace gozar de la vida, olvidando sus reglas por él. Pablo, por su parte, tiene que dejar atrás sus prisas por enamorarse para descubrir que el amor hay que desmenuzarlo poco a poco, disfrutando de cada momento y saboreándolo sin el miedo al después. Así, dos personas con deficiencias emocionales aprenderán que querer a alguien puede ser la cura que estaban necesitando.
Otros personajes, que han hecho de la novela lo que es, son Amaia y Sandra, las amigas incondicionales de Martina, esas que toda persona quiere a su lado en los buenos y los malos momentos. Ambas son el contrapunto de nuestra protagonista, con caracteres muy especiales que harán que el lector no se muestre indiferente a ninguna de ellas. Así, tenemos a Amaia que es enfermera y una loca sin remedio. Vive la vida al máximo y sabe divertirse, una mujer que brilla con luz propia o, por lo menos, eso es lo que ven los demás, ella por el contrario, no sabe apreciarse porque piensa que es demasiado corriente para merecer la pena, lo que le produce inseguridades que intenta suplir con su disparatada forma de ser. El amor es su asignatura pendiente y hasta que se presente su caballero andante se apoya en Javi, su mejor amigo , ese que la hace sentir segura y a salvo. Sandra, por su parte, es la eterna estudiante del grupo, opositora a notaria desde hace algunos años, ha construido una zona de confort a su alrededor de la que no quiere salir, por lo que cuando se ve obligada a hacerlo no sabe cómo manejar su vida, todo es nuevo y su actitud segura y despreocupada ya no le sirve para enfrentarse al mundo y a sus responsabilidades.
Elísabet Benavent me ha maravillado con su manera de narrar tan realista, con un lenguaje llano y muy actual, presentando a personajes absolutamente geniales, muy carismáticos y divertidos. A esta autora la caracteriza una prosa fresca y ágil que te mete de lleno en la historia que está contando, la cual se vive intensamente junto a unos protagonistas que van descubriendo poco a poco ese amor que los une, ese algo que se deja ver desde el primer cruce de miradas, resultando mucho más que una simple atracción sexual, y que el lector percibe casi al momento, aunque ellos se empeñen en negar la evidencia. He podido descubrir que Elísabet es una experta describiendo estos sentimientos, de tal manera que llegas a hacerlos tuyos, por lo que no puedes evitar reír, llorar, sufrir y enamorarte cada vez que lo hacen sus personajes, experimentando de primera mano todas esas emociones. Como he dicho al principio de mi reseña, es una novela real como la vida misma, y nada mejor que ambientarla en la cocina para hacerla más autentica, un arte que permite que descubras el placer a través de los sentidos y del que Pablo es un maestro, intentando transmitir su pasión por la vida en sus platos. En definitiva, una primera parte espectacular para esta bilogía, dejando el listón muy alto para un desenlace que estoy deseando leer.
Martina con vistas al mar de Elísabet Benavent es una maravillosa novela con una apasionante y sensual historia de amor entre dos personas muy distintas que cuando están justos son pura dinamita, un romance que enseñará a nuestros dos amantes que amar es darlo todo sin guardarse nada, aunque eso signifique saber desde el principio que tu corazón al final terminará destrozado.