La depresión es un peso del que no puedes liberarte. Te aplasta, hace que incluso las acciones más insignificantes como atarte los cordones o masticar una tostada sean como el arduo ascenso a una alta cumbre.La narración de este libro es lo que más me gustó. Desde el primer momento te engancha y quieres seguir leyendo. Puedes sentir mientras lees toda la tristeza que va consumiendo a Aysel. Cómo se siente, todo lo que la atormenta. Aunque nunca hayas pasado por algo como ella, o pienses que tus problemas sean insignificantes, vas a entender por lo que ella está pasando. Que una narración logre tal conexión entre un personaje con el lector es algo maravilloso, porque el libro se hace más real para ti.Los personajes son para amar. Aysel y Roman son personas a los que solo quisieras tener en frente para poder darles un abrazo y hacer lo posible por que se sientan mejor. Aysel es un personaje atormentado, pero a lo largo del libro se puede apreciar una evolución en ella. El modo en el que ve el mundo va cambiando y ella se va haciendo más fuerte.Esta es una historia que va más allá de ello. Fue escrito para dar un mensaje, y nos muestra cómo una persona es capaz de superar sus peores demonios con unas simples acciones y con ayuda de otros cuando se abre a ellas.En resumen, Mi corazón en los días grises es un libro de superación, que te muestra los momentos más oscuros de una personaje y cómo esa persona es capaz de abrirse paso a través de todo lo que la atormenta para mejorar. Escrito de una forma que te atrapará y no querrás dejar. Aunque tenga pocas páginas, te hace sentir muchas emociones, y estar conectado a ellas. Una historia que recomiendo a todo el mundo, sobretodo si estás en esos momentos en los que deseas acabar con todo.