EDITORIAL VERSATIL
El escritor Pedro Feijoo, nos trae su último trabajo, cambiando totalmente de registro con respecto a su anterior novela “Los hijos del mar”, en la que nos narraba una historia de aventuras con trasfondo histórico, y en esta ocasión el escritor nos sorprende con “Morena, peligrosa y románica” llena de personajes singulares y mucho, mucho humor.
“Con su permiso voy a introducir un argumento: cuando la señora Chismes, vecina del segundo derecha, llamó a mi puerta, yo pensé que lo que venía buscando era mi amor. O un poco de sal… Pero por lo visto el asunto no iba por ahí. En lugar del deseo ardiente de verme en ropa interior, lo que aquella mujer traía en la cabeza eran dos cosas bien distintas: demasiada colonia barata, y la intención de implicarme en el mayor robo del siglo.”
Si ustedes se lo permiten, maravillosos lectores, Dante Odeón os relatará una comedia que aunque esté plagada de risas, en ocasiones puede convertirse en tragedia, porque ya todos sabemos que ambas forman las dos caras de la misma moneda que es la vida, siendo correcto decir que“la desgracia, es necesaria para poner en valorel verdadero peso de la felicidad y todas sus virtudes”; pero eso sí, protegiendo la cabezay teniendo siempre cuidado de no recibir demasiados golpes.
A través de sus palabras iremos conociéndole, encada página un poquito más. Se nos presenta a un hombre decepcionadorespecto a la naturaleza humana, cínico y un tanto pedante en su manera de hablar pero en cierto modo entrañable, porque él nada esconde y si tiene que mentir para atraer a las féminas, pues así lo hace. Si en algo se caracteriza Dante es por ese desparpajo con el que lleva a cabo cado uno de sus proyectos y se enfrenta a sus problemas, echándole valor y por supuesto mucha caradura. Siempre le ha tocado pelear, para él “la vida no es mas que un viaje incómodo, en un asiento demasiado estrecho, y siempre lejos, muy lejos, de primera clase”Así entre unas calamidades y otras y diversas decisiones desacertadas, más motivadas por beneficiarse a la vecina que algún que otro objetivo más humanitario, Dante realizará un viaje dantesco en el que tendrá como compañeros a un grupo de marginados ignorantes, con los que Feijoo ha logrado traspasar las páginas, dotándoles de vida, por lo que no nos extrañaría encontrárnoslos confabulando en cualquier antro de Barcelona.
Es esa manera de narrar tal vez lo más singular de la obra de Feijoo, con cierto toque a resabido y antiguo lo que está en contraposición con los personajes con los que se rodea Odeón, recordándome en cierto modo a una obra de los hermanos Marx, con Groucho convertido en el señor Odeón, con ese extraño sentido del humor, encaminado a realizar una crítica a la sociedad, sobre todo a sus hipocresías y falsedades. Feijoo ha introducido en este camarote todo un elenco de personajes hilarantes llevados a la exageración, con el objetivo de conseguir poner en nuestra cara una sonrisa, al lado de alguna que otra carcajada; también vendrán en ayuda de esta noble tarea, la multitud de frases, argumentos y conversaciones llenos de doble sentido, juegos de palabras fáciles, en algunos casos conocidos por nosotros, pero que en este contexto nos parecen diferentes.
Permítanme introducirles un argumento final, sagaces lectores, comedia o drama tampoco importa mucho para poder disfrutar con una buena historia plagada de personajes singulares y frases con dobles intenciones que nos van envolviendo en la trama y nos visten con una sonrisa hasta llegar al punto final.