SINOPSIS: Lee la sinopsis de este libro pinchando AQUÍ
Hace unos meses descubrí la prosa de Arlette Geneve gracias a la lectura de El carcelero de Isbiliya, una novela que me gustó mucho y que me dejó con ganas de repetir con esta autora. No tuve que esperar demasiado puesto que este verano ella me regaló su última obra, Mudaÿÿan, de la que ya había visto varias reseñas positivas y estaba deseando leer, por lo que no tardé en hacerle un hueco entre mis lecturas.
La trama de Mudaÿÿan nos traslada al siglo XIII, concretamente al año 1213 en plena lucha entre los reinos de Castilla, Navarra, Aragón, León y al-Ándalus. Adoain Estella se encuentra prisionero en el castillo del Cerro de Santa Bárbara por orden del rey Sancho de Navarra, acusado falsamente de intentar violar a una mujer. Es aquí donde el propio Sancho le comunica que su padre, el conde de Bearin, ha sido asesinado en tierras de Castilla mientras intentaba cumplir la misión encargada por el rey de traer a su nieto ilegítimo a Navarra. Puesto que la misión no ha sido cumplida, el rey Sancho encarga a Adoain que se traslade a Castilla para completar la misión de su padre, trayendo al niño Juan Blasco, heredero del condado castellano de Fortún, a tierras de Navarra.Adoain inicia el viaje a Castilla con intención por un lado de secuestrar al pequeño Juan Blasco y por otro de vengar la muerte de su padre. Pero al llegar al castillo de Fortún en Toledo, conoce a Dulce Álvarez, tutora del niño, surgiendo entre ambos una atracción instantánea y una pasión que irá aumentando progresivamente a pesar de perseguir intereses y misiones opuestas.
Además de la correspondiente división por capítulos, la novela se encuentra dividida en tres partes más un epílogo final. La primera, "Ira y fuego", es muy corta ya que solo comprende el prólogo en el que se recoge una pequeña introducción presentándonos a algunos de los personajes en su infancia. Las dos siguientes responden a estas mismas palabras siendo su denominación "Ira" y "Fuego" respectivamente y a través de ellas se desarrolla la historia utilizando para ello un narrador en tercera persona.
Como os decía, Mudaÿÿan está muy bien documentada lo que se aprecia tanto en la ambientación como en la integración de los propios hechos históricos en la narración. No es una novela que nos aburra con innumerables datos sino que a través del propio desarrollo del argumento y de los diálogos entre los personajes conocemos algunos de los hechos que tuvieron lugar en esos años y nos ayuda a entender las tensiones existentes. Como es un periodo al que ya me había acercado gracias a El carcelero de Isbiliya no me ha costado mucho situarme, pero quizás al principio puede resultar un poco lioso para aquellas personas que no conozcan demasiado sobre la situación que se vivía en España en esos años. Yo en estos casos muchas veces suelo recurrir a las notas finales de los autores, pues suelen hablar del proceso de documentación, de la época en la que se han basado, de los personajes reales que han utilizado, etc y al menos a mí me sirve para hacerme una idea más clara.
Respecto a los diferentes escenarios por los que se mueven los personajes, juega un papel importante también el trabajo realizado por Arlette para conocer a fondo el periodo sobre el que escribe. Esto le permite integrar con naturalidad descripciones que nos permiten hacernos una idea por ejemplo de cómo vestían en la época, qué aspecto tenían las ciudades que conocemos hoy en día o cómo eran los castillos medievales, su estructura, dependencias, mazmorras o patios interiores junto al día a día en su interior, costumbres u obligaciones a las que tenían que hacer frente los dueños de los mismos. Entre los emplazamientos principales destacan castillos como el del Cerro de Santa Bárbara en Tudela, el de Isuela en Aragón o el de Fortún en Toledo pero también cobra interés el palacio que da título a la novela, Mudaÿÿan, situado por entonces en el Emirato de Batalyaws, actualmente Badajoz.
Es en la segunda parte, Ira, donde se aprecian más aspectos históricos relacionados con las tensiones y enfrentamientos existentes entre los diferentes reinos mientras que en Fuego adquiere más importancia el romance, desarrollando la relación entre los protagonistas, que va evolucionando poco a poco y al menos desde mi punto de vista, consigue resultar convincente.
A pesar de que sea una novela calificada en romántica, creo que es muy adecuada también para aquellos lectores a quienes no les guste especialmente este género o para los que se sientan atraídos por la novela histórica; en su argumento combina aventuras, intriga, conspiraciones, venganzas, luchas y enfrentamientos sin dejar de lado por supuesto la pasión y el amor.
Los dos personajes principales son Dulce y Adoain que forman una pareja de caracteres bien definidos y opuestos, lo que no es impedimento para que se sientan atraídos el uno por el otro. En este caso me ha gustado más Dulce, una joven hermosa y de carácter tierno y bondadoso, aunque también posee una fortaleza y valentía que le permiten enfrentarse a aquellos actos que van en contra de los principios que ella defiende.
Por su parte Adoain es un hombre en el que se refleja un carácter serio, de trato frío y tono brusco, testarudo y soberbio que ante todo busca la venganza y huye de la pasión y de las mujeres, por lo que se niega a reconocer sus sentimientos y no hace alarde de ellos. Esta situación es la que consigue cambiar Dulce, por la que se siente atraído desde la primera vez que se cruza con ella, aunque no lo quiera reconocer. Es un hombre que consigue ganarse nuestro aprecio gracias a su defensa del honor y de la lealtad y a los sentimientos que apreciamos una vez le vamos conociendo.
Junto a ellos encontramos diversos secundarios tanto ficticios como reales, entre estos últimos los reyes cristianos de Navarra, Aragón, León y Castilla, el caudillo almohade, el obispo de Burgos y el arzobispo de Toledo, aunque varios apenas intervienen directamente en la trama. Por lo que se refiere a los ficticios, hay algunos personajes que sirven a su vez para enriquecer la novela ya que se convierten en protagonistas de subtramas que transcurren en un segundo plano respecto a la principal. De todos ellos destacaría a Miguel puesto que por su carácter y forma de actuar me ha parecido que introduce giros interesantes en la trama e incluso el final dejar ver que podría se podría desarrollar su propia historia en otra novela y he echado de menos un poco más de relevancia en otros como Kamil o Fátima.
En resumen Mudaÿÿan es una novela en cuyas páginas encontraremos una historia de amor y pasión que atraeráa los aficionados al género romántico, pero también un fiel reflejo de las tensiones existentes en esta época entre los diferentes reinos, todo ello a través de un estilo cuidado y una ambientación que hace de esta novela una lectura muy recomendable. No hay duda de que Arlette Geneve es una autora que merece la pena tener en cuenta tanto por los lectores de novela romántica como por los de género histórico; yo tengo muy claro que repetiré con ella.
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FUENTES: imagen autora http://www.terciopelo.net/autores/geneve-arlette-479.htm
Gracias a Arlette y a Terciopelo por facilitarme el ejemplar