Autor: Theo Lawrence
Editorial: Montena
Edición: Rústica con solapas
Año: 2013
ISBN: 9788415580430
Precio: 15,95 €
Nº páginas: 432
Dos familias enemigas, los Foster y los Rose, mueven los hilos invisibles de Nueva York. Tras años de ardiente confrontación, ahora la ciudad va ser testigo de un acontecimiento inaudito: Aria Rose y Thomas Foster van a casarse, y su matrimonio simbolizará la unión inquebrantable de los dos linajes.
Mientras tanto, en las Profundidades, un grupo de rebeldes trama una virulenta rebelión política que podría hacer temblar los pilares de la ciudad y acabar con todo lo que los Rose y los Foster han construido...
Nueva York. Un futuro en el que el calentamiento global ha arrasado con todo. Dos razas: místicos y Humanos. Tres familias. Un amor imposible. ¿Pinta bien? Mystic City tenía todos los ingredientes para ser una buena novela… Y además una cubierta que aún es más bonita en realidad que en foto.
Reconozco que había leído todo tipo de reseñas al respecto: espantosas y maravillosas. Posiblemente eso hizo que mis expectativas bajaran muchísimo a la hora de hacer frente a esta lectura, lo cual fue bueno. Me esperaba un “Romeo y Julieta” rodeado de buena ciencia ficción pero, desgraciadamente, no es eso lo que encontré. Pero tampoco voy a decir que no me leyera el libro rápido y con ganas.
El punto fuerte de Mystic City es, sin duda, su ambientación. Me ha gustado mucho, me ha sorprendido que para ser la primera obra de este autor, nos muestre un Nueva York completamente nuevo, fresco, intrigante, futurista… y todo ello bastante bien definido. Encontraremos la ciudad más chic! Y unas profundidades, que para mí, son lo mejor de la novela.
Respecto a su argumento… mi pregunta es ¿cómo tantas buenas ideas separadas (porque si, son buenas), mezclarse tan mal? El autor ha intentado juntar muchas cosas (quizá demasiadas) y el coctel resultante, no voy a negarlo, es muy deficiente. La historia es sumamente predecible, aplicas el “2+2” y ya sabes el resultado. Tiene picos de acción, unas partes son planas y otras cuando empiezan a tener miguilla decaen estrepitosamente. Todo esto, sazonado con diálogos muy flojos. Lo sorprendente de todo esto es, que pese a todo, lo he leído con gusto. El libro no me ha maravillado, tampoco lo he odiado (solamente a su protagonista), sino que simplemente es… un libro más. De esos que a las semanas pasarán a la historia pero te hizo pasar un rato entretenido.
Lo peor, sin duda, sus personajes. Aria es desquiciante, superficial, pedante, insoportable, anodina, insulsa, boba, lerda… podría seguir así eternamente. ¿Tan mal me ha caído? Sí, mucho. Mi relación odio profundo con ella empezó cuando leí esta frase y supe que, irremediablemente, nos íbamos a llevar mal, muy mal.
"De modo que hago lo que cualquier chica haría cuando un chico guapísimo le salva la vida en las sórdidas Profundidades de Manhattan: dejo que me saque de allí."
Él la salva la vida y ella… ¿qué pasa nena que si es feo no te vas con él y que te coman los tiburones? Esto es solo un ejemplo, el libro está plagado de comentarios sobre sus musculosos e increíbles brazos, sus abdominales cual tabla para cortar jamón, etc. Queda clara una cosa: si él no está bueno se queda sin la chica.
Respecto a Hunter…es plano. Es un personaje totalmente liiiiiiiiiisooooo todo el libro. ¡Un poco de sangre! Creo que como “representante” de los místicos, el autor tenía una bomba que explotar. Pero no, pasa sin pena ni gloria, solamente como objeto sexual de la protagonista.
Los secundarios ¡esos si son buenos! Son los únicos personajes que se salvarían de una quema de brujas en la novela. Si le diera la vuelta a la tortilla y los dos protagonistas quedaran en 2º plano… sumaría unos cuantos puntos a la historia.
- Web oficial del autor.- Ficha del libro en Goodreads.
Agradecimientos a Montena por el ejemplar.