Sus padres deciden mandarla a una escuela para chicos problemáticos. Pero Cimmeria no es una escuela normal: no permiten ordenadores ni teléfonos móviles y los alumnos son, o superdotados, o ricos. Pero, además, Cimmeria esconde un secreto, un secreto que solo comparten algunos profesores y los alumnos de las misteriosas clases nocturnas de la Night School.
A pesar de todo, Allie parece feliz. Ha hecho nuevos amigos y uno de los chicos más atractivos de la escuela le dedica toda su atención. Y, claro, también está su relación con Carter, ese chico solitario con el que siente una inmediata conexión.
Todo parece ir bien hasta el momento en que Cimmeria se convierte en un lugar terriblemente peligroso donde nadie parece a salvo. Allie tendrá que elegir en quién confiar mientras descubre los secretos de la escuela.
Así llega a Cimmera, el internado de pijitos donde pasará el curso totalmente aislada del mundo exterior: sin aparatos electrónicos y totalmente rodeado de bosque. El sitio que conseguirá que vuelva a lo que una vez fue, con ayuda de su amiga Jo (que resulta ser más problemática que la protagonista), su grupo de amigos y sobre todo de el-chico-misterioso-y-malote-del-insti.
Pero más pronto que tarde, Allie descubrirá que en esta academia se encuentra la Night School, un grupo de alumnos que dan clase por la noche e incluso tienen un ala del edificio destinada a ellos. Nadie sabe lo que hacen, nadie sabe quienes son.
Esto precisamente, el misterio de descubrir qué es la Night School exactamente, y qué hay en los bosques del internado, fue lo que me hizo leer este libro en menos de dos días. Rápido de leer, muy fresco y el argumento es original, yo creía que sería otra historia de vampiros o algo así.
Por supuesto hay un triángulo amoroso que al final acaba mal. Guau, ¡nadie se esperaba eso! Chico marginado Vs. Chico pijo-deportista. Y la pobre chica dando vueltas, que si me gusta más este, que si no...Y tu ya estás como:
Algo que agradezco muchísimo es que la historia avanza a un ritmo bueno, sobre todo al principio. Cuando ya estás llegando al final, sí es verdad que se ralentiza un poco porque sigue estando el mismo misterio y apenas se descubre nada.
Bueno, al final pasa algo...normal, bastante normal. Creo que podría ser algo más impactante, pero no, solo da paso al siguiente libro. Ese misterio que está durante todo el libro no es muy impresionante o muy especial, esperaba algo sobrenatural o algo de...¿magia?
Total, cada libro es un mundo, y este me ha gustado bastante, aunque le cambiaría el final y ciertos detalles, por lo que le doy 4/5. Leeré pronto el segundo, ¡a ver qué tal!