Reseña: Nunca volverás, de Hans Koppel

Publicado el 11 noviembre 2014 por Chema Fernández @chemaup

SINOPSIS
          Mike Zetterberg, su esposa Ylva y su hija Sanna viven en Helsingborg, en el sur de Suecia. Cuando una tarde, tras el trabajo, Ylva no regresa a casa, su marido deduce que está con sus compañeros tomando una copa. Pero a medida que pasan las horas su preocupación va en aumento. Ylva se ha esfumado sin dejar rastro. Pasados unos días, la policía investiga el entorno de la desaparecida y sigue de cerca los movimientos de Mike, que pasa a ser el principal sospechoso. Para él, la vida se convierte en un infierno: no sólo tiene que demostrar su inocencia, sino también coger fuerzas para sacar adelante a su hija a pesar de su desasosiego y su desconcierto. Lo paradójico es que Ylva está secuestrada a pocos metros de allí, en la casa de sus vecinos; esa pareja mayor que se mudó hace unos meses al barrio y que parece tan normal...
OPINIÓN
          Había oído hablar de esta novela y la verdad que al ser corta me animé porque parece una lectura amena y decidí darle una oportunidad. La novela de intriga o thriller es una de mis favoritas, no se, a veces sale mi lado más sádico y me gusta pasarlo mal o por lo menos que el autor lo intente lo mejor que puede. Cierto es que muchas veces no lo consigue y otras veces sí, en este caso se puede resumir en un quiero y no puedo o no llego a más.
          Ylva desaparece un día como otro cualquiera, es secuestrada por sus vecinos que anteriormente se conocían por sus relaciones hace un par de años. Quieren vengarse por un hecho del pasado y para ellos deciden instalarla en una habitación en su sótano en el que estará permanente vigilada y que su único contacto con la realidad es una televisión que emite día y noche las imágenes de una cámara de seguridad que está apuntando a sus casa constantemente. Durante el cautiverio, Ylva sufre vejaciones y violaciones reiteradamente y de alguna manera empieza a sufrir el famoso síndrome de Estocolmo. Por otro lado tenemos a Mike y Sanna que desde el primer momento se preocupan por la desaparición de su mujer y madre a la vez que intentan rehacer sus vidas poco a poco ante la ausencia de ella, desconociendo que Ylva está en la casa de al lado encerrada.
          La verdad es que el libro es muy ameno y se hace bastante corto, en dos días lo tenía terminado, pero el balance que le puedo dar no es sumamente positivo, sino un regular. Pese a que la trama es bastante ágil con capítulos cortos, diálogos sencillos y directos echaba en falta una mayor profundidad de los hechos porque me parecieron que los tocaron muy superficialmente. En mi opinión podía convertirse en una mejor novela con más páginas y más desarrollo.
          Los personajes no llegaron a transmitirme mucho, a Mike lo odio, tiene mi mayor y absoluto desprecio, a parte de ser un llorón que no para de quejarse y lamentarse, aparece como un personaje super débil que daba pena y ganas de sacrificarlo de una vez por todas. Ylva creo que no se ha llegado a profundizar mucho más en su estado. Estando secuestrada y en un ambiente claustrofóbico y con reiteradas violaciones, no me parecieron sus actos como los de una verdadera víctima. Puedo decir que Sanna sería la única que gana mis simpatías porque del resto no. Del papel de los secuestradores, mejor ni hablemos porque no me parecieron creíbles y después tenemos ahí a dos personas colgando que están puestos en la novela con un calzador, que más sobran que otra cosa.
          El narrador omnisciente en tercera persona nos proporciona exactamente una visión más general de la historia porque vamos conociendo un poco todos los pensamientos de los personajes, pero creo que echaba de menos la primera persona aunque sea en el papel de Ylva. Un narrador en primera perspectiva nos daría la profundidad necesaria y lo verdaderamente mal que lo está pasando la protagonista en los malos momentos.
           En definitiva, una novela superficial que pudo ser más pero quedó en el medio del camino. No me malinterpretéis, ha cumplido su cometido y la he disfrutado pero echaba de menos un mayor desarrollo de la trama. Los personajes han sido el punto débil del libro, no me llegaron a convencer del todo y pudieron dar mucho más de sí. En cuanto al autor, espero que siga por esta línea y que no se quede en lo de arriba porque hay mucho más abajo..

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