Jake Rivers y Henry Woods siempre fueron polos opuestos, como el día y la noche, como el frío y el calor. Ambos son respetados, carismáticos y queridos por todo el mundo, pero mientras Henry, capitán del equipo de fútbol del instituto, tiene a todo el mundo bajo su control, es egocéntrico y vanidoso, Jake, líder de un grupo de rock de poca monta es un alma libre, que prefiere vivir la vida a su manera, sin importarle demasiado lo que piensen los demás. Henry odia a Jake por ser el único al que no puede controlar, y Jake odia a Henry por ser un chico egoísta y cruel. Entonces, ¿por qué no pueden evitar sentirse atraídos el uno por el otro? ¿Cómo es posible que se odien hasta tal punto de no poderse ignorar?
"Del odio al amor solo hay un paso".
Sí, lo admito:
quería leer esta novela sólo por esa portada tan bonita, llamativa y colorida *-* Lo sé, soy una superficial...
pero después leí la sinopsis y comprobé que se trataba de una novela de temática LGBT (hasta la fecha creo que no había leído ninguna) y me llamó aún más la atención, así que decidí investigar un poquito y encontré unas cuantas reseñas que hablaban genial de la novela, por lo que mis expectativas se elevaron a la enésima potencia y quise leerlo. Anteayer terminé la novela y hoy, por fin, tenéis mi opinión.
Tengo muchísimas cosas que comentar, así que espero que no quede una reseña demasiado larga para no aburriros.La novela se nos presenta
narrada en tercera persona desde el punto de vista de Jake y Henry, nuestros protagonistas. Estos chicos
son polos opuestos, como bien dice la sinopsis.
Jake es un chico humilde, pasota y despistado y es el
líder del grupo de rock que tiene con sus amigos, donde toca la guitarra.
Henry,
además de ser un creído, egocéntrico y arrogante, es el chico más popular del instituto. Vive por y para el fútbol y, a diferencia de Jake,
sí que le importa lo que piensen los demás.
Hay otros muchos personajes que intervienen en la trama como pueden ser:
Lyla (la mejor amiga de Jake desde el colegio),
el grupo de amigos de Henry,
el grupo de amigos de Jake,
Claire (la hermana de Henry), entre otros. Y
el primer problema llega con los personajes, y es que
no he conectado ni he empatizado con ninguno de ellos...
¡y será por personajes! Pues nada...
ninguno me ha convencido, ni les he cogido cariño, ni he sentido nada positivo hacia ellos.
Sencillamente no me han gustado cómo son ni cómo actúan.
Me han parecido unos personajes estereotipados, planos y predecibles, que sólo se preocupan de ligar, montar follón y decir palabrotas continuamente y que evolucionan poco -o nada- durante la novela. Sí, es cierto que llega un momento (más concretamente: hacia las últimas 150 páginas)en que los protagonistas cambian el chip y experimentan un cambio radical, pero en mi opinión
ese cambio llega demasiado tarde y es demasiado notorio, así que seguí pensando lo mismo de los personajes hasta el final.
De la
trama también tengo muchas cosas que contaros. Ya he comentado antes que
uno de los principales motivos por los que quería leer esta novela fue que se dejaba entrever un romance entre dos chicos jóvenes y sentía mucha curiosidad. A mi la trama
me ha decepcionado mucho porque no me han gustado ni la forma en que la autora ha llevado el "romance" ni el propio romance y en muchos momentos me ha llegado a aburrir.
Para mi, la novela se divide en dos partes.
La primera de ellas, que llegaría hasta la página 350,
no me ha gustado nada porque sigue el mismo patrón una y otra vez (peleas entre ambos grupos y fugaces encuentros sexuales entre Jake y Henry).
Lo siento, pero a mi esto
me aburrió mucho porque apenas pasaban cosas interesantes y esto, unido a la falta de emociones y sentimientos por parte de ambos protagonistas
(sobre todo en los encuentros sexuales) y la constante sucesión de situaciones poco creíbles,
hizo que la lectura se me hiciese muy cuesta arriba porque la historia no estaba tomando ningún rumbo y me parecía un sinsentido.
Os aseguro que
en más de una ocasión he pensado en abandonar la novela y rendirme al ser este uno de los muchos motivos que me impulsaban a ello.
A las 150 páginas cerré la novela y pensé en traeros una mini-reseña explicándoos los motivos por los que decidí no seguir adelante con ella, pero
después pensé en el esfuerzo que hizo la editorial al enviarme el ejemplar y que siempre intento (en la medida de lo posible) no abandonar lecturas y me entraron remordimientos,
así que decidí armarme de paciencia y darle otra oportunidad (o mejor dicho: una oportunidad tras otra).
Pero
la segunda parte, que comprendería las últimas 150 páginas de la novela,
sí que me gustó algo más porque POR FIN llega ese cambio que tanto esperaba en Jake y Henry. Es cierto que llegó tarde, pero al menos mereció la pena no abandonar la novela porque
al fin la trama siguió el rumbo que más o menos esperaba y, aunque se ve llegar desde la primera página, me gustó. Además,
considero que a partir de ese cambio la novela se vuelve mucho más ágil, amena y entretenida.
Otro de los elementos que me impidieron disfrutar de la novela como esperaba
fue la pluma. El estilo de la autora
no me ha convencido en absoluto porque, pese a saber que esta es su primera novela,
he encontrado muchas faltas de ortografía e incluso omisión de signos de puntuación (o casos en los que sobraban o estaban mal colocados). Además,
me resultó molesto que se repitiesen tanto los nombres de los personajes, que no son pocos;
creo que la autora lo hizo para poder diferenciarlos mejor pero a mí me ha provocado el efecto contrario.
Los capítulos son cortos en su mayoría, pero a mi se me hicieron eternos por todo lo que os he ido comentando hasta ahora y porque
la letra es bastante pequeña. Esto, unido al hecho de que apenas distinguía los puntos de vista de ambos protagonistas hasta haber leído un par de párrafos, hizo que me confundiese bastante y me agobiase mientras leía.
Y llegamos al esperado
final. Me pareció
un final bonito y apropiado para la historia, después de todo,
pero se me hizo predecible y precipitado.
Es como si al final, en las últimas cincuenta páginas más o menos,
ocurriese todo muy deprisa y me ha dejado con la sensación de que esta novela se podría haber contado en la mitad de páginas y habría obtenido un mejor resultado,
dando lugar a una trama más y mejor desarrollada y mucho más emocionante, entretenida y, obviamente, más ágil.
He leído en otros blogs que Only one step es la primera parte de una trilogía. No sé cómo reaccionar ante esta noticia porque para mi
el final de esta primera parte es cerrado, pues creo que todos los cabos quedan bien atados y no tengo ni idea de qué tratarán la segunda y la tercera parte, pero dudo mucho que continúe con la trilogía.
Al empezar esta reseña os comentaba que leí unas cuantas reseñas de la novela y todas, absolutamente todas, hablaban genial de ella.
Yo, tras terminar de leerla, llegué a sentirme mal por tener que escribir una reseña negativa pero al fin y al cabo es sincera.
No quería engañaros a vosotros ni a mi misma, así que lo siento pero no, no coincido con ninguna de las opiniones que he leído porque
ni esta novela ha marcado un antes y un después en mi vida, ni me ha emocionado ni la he disfrutado. Pero
os repito lo que siempre digo:
si os llama la atención esta novela y creéis que puede llegar a gustaros, os animo a que le deis una oportunidad y la leáis, que para gustos los colores :)~ Gracias a
Chiado editorial por el envío del ejemplar
~Y vosotros,
¿habéis leído este libro? ¿Os gustaría leerlo? Contadme
:)¡Nos leemos en la próxima entrada!¡Un saludo!