523 páginas || Papel y ebook
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Estamos en el año 2044 y, como el resto de la humanidad, Wade Watts prefiere mil veces el videojuego de OASIS al cada vez más sombrío mundo real. Aseguran que este esconde las diabólicas piezas de un rompecabezas cuya resolución conduce a una fortuna incalculable. Las claves del enigma están basadas en la cultura de finales del siglo xx y, durante años, millones de seres humanos han intentado dar con ellas, sin éxito. De repente, Wade logra resolver el primer rompecabezas del premio y, a partir de ese momento, debe competir contra miles de jugadores para conseguir el trofeo. La única forma de sobrevivir es ganar, pero para hacerlo tendrá que abandonar su existencia virtual y enfrentarse a la vida y al amor en el mundo real, del que siempre ha intentado escapar.
Cuando me hice con este libro, fue con la idea de leerlo antes de ver la película. No fue así, se estrenó, yo no lo había leído aún, y fui a verla con Iñaki y un amigo, los dos muy frikis y muy fans de la época que muestra la historia. Los tres salimos encantados del cine, ellos con ganas de poder verla deteniéndose en cada referencia, porque fue una locura todo lo que ellos reconocieron, y yo no, porque reconozco que no soy muy aficionada a los videojuegos, y menos en los 80-90 que era solo una niña (soy del 83, no tuve mi primera consola, una Atari, hasta después). El caso es que la película me gustó mucho, porque aunque menos, yo sí reconocí muchas de las cosas que aparecían, sobre todo las que tienen que ver con películas y series, y me moría de ganas de leer el libro, porque sabía que había muchas más. No lo he hecho hasta ahora, y me ha encantado, pero lo cierto es que no pueden ser más diferentes. Pero a pesar de eso, de que el juego no tiene nada que ver en el libro y la adaptación, y muchísimas de las referencias tampoco, creo que son dos versiones de un mismo universo y que las dos merecen mucho la pena. De verdad, me quedo con ambas.
Soy consciente de que es un libro que quizá no a todo el mundo llegue a gustarle. Que aunque no necesitas ser un experto en la década de los 80, en videojuegos, series, películas y música, sí que tienes que tener una idea al menos para saber de qué están hablando, porque si no dudo que puedas llegar a disfrutar esta historia igual. Pero si has nacido en esos años, o antes, o después pero te has enamorado de esa época, tienes que leerlo, porque te encantará. Para mí, lógicamente, ha sido más fácil reconocer ciertas referencias en la película que en el libro, pero aun así se nombran cosas que me encantan, y dan ganas de volver a verlas, lo reconozco. Pero lejos del tema de los videojuegos y todo lo demás, es un libro que cuenta una historia muy interesante, en un futuro relativamente próximo al nuestro, y que nos habla de luchar por lo que creemos, por lo justo, por nuestros derechos, y de negarnos a dejarnos pisotear por los que tienen más poder, o más dinero. Es un libro en el que tenemos a un protagonista que no lo ha pasado nada bien a lo largo de su vida, y con el que nos es muy fácil empatizar, y que a medida que leemos nos morimos de ganas de que sea el vencedor, y de que consiga tener una vida real que merezca la pena.
En resumen, 'Ready Player One' nos cuenta la historia de Parzival, un chico que esconde y olvida sus problemas en el juego de Oasis, un mundo virtual en el que puede ser quien quiera ser, y hacer lo que desee. Él, junto a otros usuarios que terminarán siendo sus amigos, intentará encontrar el Huevo de Pascua que el creador de Oasis escondió antes de morir, y que les proporcionará recursos y dinero suficiente para poder empezar de 0 su vida soñada. Tendrán que hacerlo antes de Sorrento y sus sixeris, capaces de hacer lo que sea por conseguir ser los vencedores, aunque sea pasando por encima del resto de jugadores. Y porque saben que lo que hará esa gente con el premio no incluirá nada beneficioso para el resto de usuarios. Es un libro que os recomiendo si os consideráis frikis, amantes de la década de los 80-90, si vivisteis todo lo que se vivió en ella o lo hicisteis después pero sois conscientes de lo mágica que fue, y, sobre todo, si os gustan los videojuegos, porque en todo momento sentiréis que estáis jugando y viviendo uno.