Reseña: Recuerda que me quieres, Wendy Davis

Publicado el 30 agosto 2014 por Mandarina @librosconalma


Título: Recuerda que me quieresAutoras: Wendy Davis (Fátima Embark y Merche Murillo)Editorial: KiwiAño: 2014Páginas: 423

Personajes: Wendy, Peter, Christian, Charlie, Thomas, Sean, NickTemática: novela juvenil, realismo mágico, fantasíaLocalización espacio-temporal: Londres, s. XXI
 
Resumen oficial:
Cien años después la historia se repite. O quizá no. Todavía no se conocen. Ni siquiera se intuyen. Peter y Wendy tienen un destino común del que no podrán escapar. La aventura de la vida y la magia del amor empiezan aquí, contigo, en cuanto te atrevas a descubrir su historia.Podríamos hablarte sobre caracoles, estrellas, princesas que no sienten dolor, palabras inventadas, catarros mal curados o mundos rellenos de sueños donde todo es posible. Por explicarte podríamos deleitarnos y ser un poco malas y adelantarte que el amor no siempre es dulce. Pero claro, eso sería adelantar acontecimientos y no entenderías nada. Así que olvida las últimas líneas y sumérgete en una historia donde todo es posible, incluso que el sol y la luna se besen. Pronto, todo tendrá sentido. Bienvenido a nuestro particular Nunca Jamás.

Mi opinión:
No me gustan las tendencias, me gustan las diferencias.
Cada vez que oigo que algo está de moda, o que "esto es lo que se lleva", me pongo mala. No puedo ni oír que alguien pueda realmente seguir una moda y no darse cuenta de que la están manipulando. Las noticias que cuentan medias verdades, las películas que te cuentan "lo que quieres ver" pero no la verdad, los libros que escriben "lo que quieres oír" porque eso es lo comercial.
No, a mi me gusta lo auténtico, lo que sale de uno mismo en un momento determinado. Cada instante en nuestra vida es único y no se volverá a repetir, por eso me niego a que otro, un anuncio, un producto, una marca...me diga lo que debo ponerme para ser yo. Porque es imposible que ellos sepan cómo soy, quién soy...y adonde voy. Si en algunos momentos no lo sé ni yo.
Y vengo a referirme a los libros "comerciales". Aquellos que tanto leemos porque es el momento de las sagas, o de los romances, o de las distopías...o qué se yó que esté de moda. Preferimos el envoltorio en lugar de la esencia de las cosas. En lugar de profundizar en nuestros sentimientos, preferimos que lo que leamos nos haga "olvidar" lo que somos o sentimos para no sufrir ese dolor. Pero con un libro que acabo de leer se me ha revuelto todo eso. Yo soy de las que suele leer novela juvenil "americanizada envasada" podríamos decir. Consumo rápido, lectura fácil, cómoda, que no duela, a poder ser fantasía. Y o digo que eso sea malo, sino que a menudo tendríamos que leer algo que de verdad nos haga pensar, sentir y vivir. Enfrentarnos a la vida, crecer, como Wendy hace en esta novela que os traigo. Ella quiere madurar como escritora,y, a la vez tendrá que sufrir para sentir lo suficiente la vida y transmitírselo a otros. Peter es lo contrario, huye de la realidad que le duele y vive en sus fantasías y aventuras.

No quiero ser Peter, y pensaba que eso era lo que quería. No quiero vivir siempre de espaldas a la vida, vivir una fantasía. Dicen que hay libros que cambian algo dentro de ti, que te hacen darte cuenta de algo. Sentirme demasiado identificada con Peter me ha hecho darme cuenta de que en realidad quiero ser Wendy, madurar y crecer.
Esta es una reseña algo diferente, pero una reseña "comercial" no servía esta vez. Este libro te habla de la magia que hay en la vida misma, en vivirla tal cual es sin necesidad de la fantasía pura en la que a veces nos encerramos. No hace falta vivir en un sueño eterno para huir de nuestros problemas. Lo que de verdad importa es despertar y aún así tener el valor de seguir viviendo, de luchar por ser nosotros mismos.
Yo no soy como los demás. Yo no formo parte de un grupo "de moda". Quiero ser yo misma sin tener que mirarme en los demás para serlo. Y se puede hacer, cuesta ir contracorriente, pero ser fiel a una misma no es imposible. Cuesta crecer y dejar la infancia que te protege del daño emocional que representa enfrentarse a todo diariamente. Pero mucho peor es vivir siempre en una jaula de cristal.
Este libro tiene esa esencia propia de los cuentos clásicos pero con la mirada puesta en la realidad. Y eso me ha gustado. He estado mucho tiempo leyendo fantasía porque la literatura realista era demasiado dramática para mi y me recordaba cosas vividas. Pero me he dado cuenta de que el realismo mágico es lo mío. Ahora sí que sí.
Y si eso no está de moda, mejor para mí porque...¿he dicho ya que no me gustan las modas?.
Puntuación: 5/5