Con este tomo iniciamos la colección Relatos terroríficos, destinada a conformar toda una biblioteca integrada por las historias que han hecho a Junji Ito merecedor de la etiqueta de maestro del terror.
Sobradamente conocido gracias a obras como Uzumaki, Black Paradox o Gyo, Junji Ito es uno de los mangakas más reconocidos y personales de la actualidad. En la primera entrega de esta colección, conoceremos las desventuras de seis hermanos huérfanos y la historia de una mansión no apta para claustrofóbicos, nos advertirán sobre los peligros de la cirugía estética, y nos sorprenderá un cuento tan breve como impactante.
Desde aquí doy las gracias a Eris y a su parte oscura del blog Planeta Eris por el regalazo que me enviaron por mi cumpleaños en abril. Saben que me encanta el terror y por si fuera poco, el terror japonés es uno de mis favoritos por las truculentas historias que suelen crear con bastante acierto. Junji Ito es el llamado genio del terror japonés y es que sus historias a través del manga suelen ser bastante impactantes y suelen recrear a la sociedad japonesa con su virtudes y defectos.
En Relatos Terroríficos 1, Junji Ito nos narra y dibuja cuatro historias de terror que pasa por una familia bastante atípica hasta el relato de una chica que decide operarse para quitarse sus complejos que le amargan la existencia. Relatos cortos en el que Ito refleja a una sociedad igual pero a la vez diferente a la occidental.
El relato de esta novela con el que me quedo sería el de La mujer de las costillas rotas que nos narra como una chica con un complejo por su cuerpo decide operarse las costillas para quitar un par de ellas. A los pocos días empieza a escuchar unos sonidos estridentes que solo ella puede escuchar y la llevan hasta el bosque donde una mujer está tocando una especie de arpa con sus costillas y le explica una historia aterradora que nos dejará con la boca abierta.
Muchas de las preocupaciones de los japoneses tienen que ver con los problemas universales que solemos tener a lo largo y ancho del mundo. Lo diferente de ellos es el verdadero culto que tienen hacer los antepasados y es algo que se deja ver en el primero de los relatos o también el machismo que impera allí mismo, con violencia de género que parece estar a la orden del día. Ese reflejo de la personalidad de los orientales en el manga me parece que Ito lo plamas de una manera bastante fiel.
El dibujo es el típico de los mangas aunque mucho más realistas, es decir, deja de lado los recursos de los ojos bien expresivos de otros mangas para dibujar a japoneses normales con sus ragos característicos. Se vale de los ojos para expresar ciertas situaciones en los que la ambientación y el momento lo requieren y lo consigue de una manera bastante peculiar.
En defintiva, Relatos Terroríficos 1 el maestro del terror japonés deja libre su imaginación para crear un ambiente lleno de misterio, terror e intriga en el que el dibujo es igual de importante que la historia por la simbiosis que crean entre ellas dos. Historias cortas y autoconclusivas que ponen los pelos de punta y consiguen sugestionar al lector como los japoneses saben hacer.
Puedes comprar el manga aquí: Relatos terroríficos 1
¿Has leído este manga o algún otro del autor? ¿Qué te han parecido? Espero tus comentarios más abajo :)