Título: Rompiendo las normasTítulo original: Pushing the LimitsAutor: Katie McGarryEditorial: DarkissAño de publicación: 2013Formato: tapa blandaPáginas: 425ISBN:9878468727493
ME DICEN QUE SEA UNA BUENA CHICA, QUE SAQUE BUENAS NOTAS, QUE SEA POPULAR… NO SABEN NADA SOBRE MÍ.
No recuerdo la noche que cambió mi vida. La noche en que pasé de ser popular a ser un bicho raro y marginado. Y mi familia está decidida a que siga así.Decían que la terapia me ayudaría.No se esperaban a Noah.Noah es el tipo de chico sobre el que me advertían mis padres. Pero es el único que me escucha. El único dispuesto a ayudarme a averiguar la verdad.Sé que cada beso, cada promesa y cada caricia son algo prohibido.PERO ¿Y SI ENCONTRAR TU DESTINO SIGNIFICA ROMPER TODAS LAS NORMAS?SIN SPOILERS
Lo que esperaba de este libro antes de leérmelo:
Esto creo que le pasó a muchas personas. Cuando vi este libro por primera vez lo primero que pensé fue, bah, historia típica de chica tonta chico malo, el chico malo que nunca se enamora, esta vez como caso excepcional se enamora de la chica tonta y todo es maravilloso. Una historia simple, de instituto, con personajes insoportables y enfin... (aún así iba a leérmelo porque la historia del chico malo me encanta, pero resultó que estaba muy equivocada). No tiene nada que ver. Así que a los que pensaran como yo pensaba de este libro, les ruego le den una oportunidad por que es magnífico.
RESEÑA:
Guau, he de decir que no esperaba para nada una historia así de este libro. Como dije en la entrada anterior me lo leí en un día, así que, no puedo decir ni pio sobre el ritmo de la novela, que, por lo menos en mi caso, me ha parecido espectacular.
A pesar de lo que he dicho anteriormente en "Lo que esperaba de este libro..." no deja de ser un libro de instituto, así que tendremos algún personajillo insoportable (lo que no incluye a ninguno de los protagonstas), y nos cruzaremos con los típicos temas que podemos encontrar en este ambiente, cotilleos, clases sociales, popularidad. Aunque en mi opinión no son la base de esta novela.
El libro me ha sorprendido muy gratamente por el trasfondo que tiene y por las situaciones tan duras a las que los protas se enfrenta. Trata temas muy duros, como abusos por parte de los adultos, la muerte, la soledad, traumas infantiles. He llorado en varias ocasiones durante su lectura, pero me ha encantado porque a pesar de tratar temas tan feos, el final te deja con muy buen sabor de boca. No es de estos libros que te deja echa polvo.
Creo que los personajes protagonistas están muy bien construidos, e incluso algunos secundarios me han encandilado. Los protagonistas vivirán algunas situaciones con las que podremos sentirnos muy identificados y otras en las que no tanto. Aún así el libro podría ser perfectamente una historia real. En ningún momento dices "buah esto es que no pasa ni en las películas".
Está narrado por los dos protagonistas, Echo y Noah, lo cual me ha encantado porque te permite ver el punto de vista de ambos, y lo que sienten. Generalmente están narrados por la chica, pero de vez en cuando también me gusta disfrutar de los sentimientos y pensamientos del chico.
Echo era una chica popular con un novio estupendo, hasta que algo pasó en su vida, que le hizo faltar a clase durante unos meses. Cuando volvió ya no era la misma, y todo el instituto rumoreaba que era lo que le había pasado. Es una chica fuerte en mi opinión. Este personaje tiene una gran evolución durante el libro. Al comienzo no sabe como enfrentar su problema y conforme se desarrolla la historia Echo va creciendo como persona y va asimilando aquello tan duro que la hizo faltar durante un mes a clase. Su historia es muy triste y me a hecho llorar, pero me gusta más la de Noah.
Noah. El también era un chico normal, el capitán del equipo de baloncesto, un chico como otro cualquiera, con una vida como otra cualquiera. Hasta que perdió a sus padres, desde entonces ha ido de un padre de acogida a otro, y no todos fueron buenos con el. Además sus dos hermanos pequeños Jacob y Tyler, están con padres de acogida diferentes. Los servicios sociales no permiten que Noah vea a sus hermanos porque creen que es una mala influencia para ellos y podría hacerles daño. Desde la muerte de sus padres Noah ha cambiado mucho, pasa de los estudios, fuma porros y su entretenimiento es ir de tia en tia, llevársela a la cama y hasta nunca. Es un personaje que me ha encantado por el fondo que tiene, por como se ha ido convirtiendo, al mismo tiempo que su mundo cambiaba.
Echo tendrá que darle clases particulares a Noah, a pesar de no aguantar su comportamiento arrogante y chulo.
Hay otros personajes interesantes, pero solo me voy a entretener un poco más en uno que me ha encantado, porque sino se va a hacer demasiado larga la reseña. Y ese personaje es la señorita Collins. En general suelo admirar a los psicólogos por su capacidad para darte la vuelta, para conocerte sin que le cuentes esencialmente nada, y especialmente esta terapeuta me ha impresionado, es increíble como se gana el respeto de Noah y Echo.
Como ya he dicho antes el final te deja con un muy buen sabor de boca, es sin duda un final feliz con una pequeñísima puerta abierta, de la que no creo que haga uso la autora, más que nada porque lo veo innecesario. Es un libro dentro de lo que cabe cerrado que está perfecto tal como está.
En resumen: Un libro la mar de entretenido con un ritmo muy ágil y una historia con profundidad y bien desarrollada. Personajes bien formados con unas situaciones complicadas. Podemos llevarnos un bonito mensaje de superación de este libro. Una historias que podría ser real, y personajes con los que podrás sentirte identificado.
9/10
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