Reseña: Rubor Etoinette #PK001 de Etude House

Por Dimitri

Últimamente me compro maquillaje coreano. Creo que lo último "occidental" que compré fue una máscara de Maybelline -que ya reseñaré porque está bastante piola. Pero fuera de eso, nada. Nothing. Ništa. Niente. Nani mo. Nihilo.
Los motivos de esta decisión son varios, pero el más importante es el siguiente: es muy barato. Aún comprándolo en dólares, sigue siendo barato. Aún con el impuesto que debemos pagar en nuestro país por las compras en el exterior, sigue siendo barato.
Como les comenté en este post, dejé de fumar (¡ya van casi tres meses!), y como regalo por mi primer mes tabaco-free, me regalé esta polvera/rubor de la colección Etoinette de Etude House cuyo lanzamiento había comentado acá, ¿se acuerdan?

Lo compré en la tienda de Ruby Ruby, me costó USD 24 y el envío fue gratuito, así que todo bien por ese lado. Tardó lo usual en llegar, unas tres/cuatro semanas. Vino bien envuelto en burbujas de plástico -las cuales reventé con placer luego de desenvolver el paquete, plic plic- en una caja.
Me sorprendió que no enviarán muestras de nada, ya que es común que estas tiendasde Ebay envíen algo siempre, pero bueno, nada vino. No es obligatorio, pero díganme si no es un lindo gesto.

Les cuento sobre el producto en cuestión:
Es hermoso.  No les voy a mentir, ya la caja te deslumbra si sos amante de las cosas super femeninas, rosadas y piripipí. ¡Y ni hablar cuando abrís la caja! El producto viene presentado dentro de una polvera rosada con ribetes y vivos en dorado.
El material es plástico, no esperen más que eso, pero funciona como objeto bonito *levanto la vista mientras escribo ésto y lo veo en mi repisa: hermoso, delicado, merecido* y eso es suficiente para muchas personas.
En un plástico transparente aparte vienen los corazones que son, en realidad, el rubor. Son diferentes tonalidades de rosado, todos perlados, y que en conjunto formal el delicado toque de color en las mejillas.

Los corazoncitos se colocan en la polvera y voilá, habemus rubor.
Cabe destacar que se incluye un aplicador tipo cisne, que curiosamente funciona muy pero muy bien para la aplicación del rubor, ya que carga una buena cantidad de pigmento. De todas maneras, pueden probar copn sus brochas elegidas y ver qué les sirve más.
Respecto a su pigmentación, la verdad es que deja mucho que desear, porque es muy, muy suave. Hay que aplicar unas cuantas capas para obtener un buen rosado, y es posible que en algunos tonos de piel cueste más hacer que se note.
Yo les aviso.
Además, al ser satinado, no es algo que a todas les agrade, pero tampoco es tan perlado como un iluminador.
Quise fotografiar mi piel con el producto pero es tan clarito que no se logra apreciar bien.
En síntesis, uno paga más por el packaging que por el producto en sí, que honestamente carece de una buena pigmentación.
¿Volvería a comprarlo? SÍ, OH SÍ. Ese packaging me deslumbra y no me molesta tener que trabajar un poco más el producto. Por ese empaque, de verdad, no me importa.
Este rubor viene también en versión durazno, la cual pueden chusmear (y comprar) acá.




¿Y? ¿Qué opinan?  ¿Se comprarían esta polvera?
Cuéntenme todo en los comentarios, hay muchas opiniones encontradas respecto a este producto y yo quiero saber qué piensan ustedes.