De qué va: la joven Beth Harmon es una huérfana con una aptitud prodigiosa para el ajedrez y obsesionada con ese juego. Adicta desde pequeña a las pastillas tranquilizantes, trata de convertirse en la mejor jugadora del mundo ganando a los grandes maestros en un mundo de hombres.
A mí me ha parecido: buena (4/5).
Por qué: ¿Puede una serie sobre una mujer que juega al ajedrez enganchar y encantar a la gente? Lo cierto es que, aunque parezca increíble, así es. Al menos en mi caso.
El primer capítulo me pareció un pestiño, debo decir que estuve a punto de desistir y que casi consiguió dormirme. Entiendo que fuera necesario hacer una introducción, aunque bien podría haber sido una introducción más corta. Pero, demonios, una vez pasado ese escollo, la serie es brillante.
La actriz es fantástica. Tiene una gran expresividad y conseguimos profundizar en el personaje gracias a ella. El resto del elenco también es magistral, y los personajes son tan peculiares que es imposible no sentir curiosidad por ellos. No es que existieran en la realidad, pero se sienten muy reales y son de lo más creíbles.
En cuanto a la trama, tiene bastante encanto aunque es sencilla: una mujer obsesionada con el ajedrez, que poco a poco supera a sus adversarios gracias a su talento hasta llegar al objetivo último: derrotar a un ruso en su terreno. Se las arreglan para hacer emocionantes las partidas, lo cual tiene mucho mérito. A nivel personal, ella es también un desastre, y no solo por sus adicciones, pero también hay una gran evolución en ese sentido.
En definitiva, una serie que ha logrado sorprenderme para bien.