De qué va: Una familia de gánsters asentada en Birmingham tras la Primera Guerra Mundial dirige un local de apuestas hípicas. Pero su líder, Tommy Shellby, no quiere conformarse y decide llevar a la familia a una posición mejor alcanzando cada vez más cotas de poder.
A mí me ha parecido: buena (4/5).
Por qué: Es una serie violenta, pero de esas que no renuncian a la trama y a crear un ambiente interesante. Ayuda mucho la música y que los actores sean de los buenos.
El protagonista, Tommy, es carismático, y su adicción al poder y al dinero son lo que mueve toda la trama a lo largo de las seis temporadas. También hay otros personajes potentes, como el hermano alcohólico y drogadicto o la tía, una mujer con una gran visión y bastante mística que, aunque a la sombra, es un pilar fundamental.
En general, me pareció una serie con muy buen ritmo, aunque debo decir que, en la penúltima temporada, reconozco que empecé a flaquear, porque pierde buena parte de su gracia y empieza a hacerse repetitiva. No obstante, la última temporada volvió a su esencia y resultó bastante espectacular, con un gran cierre y un gran cabo suelto que, imagino, se resolverá en la película que tienen intención de grabar.
Resulta muy interesante ver la evolución tanto de la banda como de la propia familia y los personajes principales, que evolucionan de forma creíble y se entremezclan en toda clase de asuntos políticos. También hay dinámicas nada despreciables con otras bandas, tanto de enemistad como de alianzas.
Además, el origen gitano de los Shelby hace que tengan entremezcladas creencias místicas y una cultura propia, que se entremezcla en toda la serie, pero sobre todo en la última temporada.
Vamos, que es una serie que mola bastante, aunque tuvo un pequeño bache casi hacia el final. Merece mucho la pena.
*:-☆-:*:-☆-:*:-☆-:*:-☆-:*:-☆-:*:-☆-:*
¿No quieres perderte más entradas como esta?