Reseña|| Si no hay un mañana- Jennifer L. Armentrout

Ahora Lena no está pendiente del mañana. No cuando el tiempo con sus amigos nunca será el mismo. No cuando las solicitudes universitarias se sienten casi imposibles. No cuando Sebastian nunca podría perdonarla por lo que pasó.

Lena es una chica que se encuentra en el último año del instituto. Su historia familiar es triste pues que tiene un gran dolor dentro de ella después de que su padre se fuera de casa y dejara a su familia. Aun así ella es alegre, le encanta la lectura, tiene buenas amigas, su vecino es su mejor amigo y ha estado enamorada de él por muchísimos años. Lena siempre intenta hacer las cosas de la forma correcta, es una persona responsable. El tener a Sebastian como amigo le ha facilitado muchas cosas y sentimientos en su vida a pesar de que nunca se ha atrevido a decirle lo que siente por él. Lena es una persona que tiene muchas ideas y pensamientos en su cabeza y simplemente no las manifiesta. Ella ya tiene pensado la universidad a la que quiere asistir, quien será su compañera de habitación y como será todo su futuro. Pero una noche, la vida de Lena cambia por completo debido a un accidente.

Lo que tenía planeado le parece tan insignificante comparado a lo que sucedió que simplemente deja de pensar en futuro alguno. Lena se culpa por lo que pasó esa noche y ese dolor le impide avanzar, la aleja de sus amigos e incluso de Sebastian. Se siente perdida, sola y sin ánimos para pensar o imaginar algo más allá del dolor y la culpa. Lena pudo haber hecho algo aquella noche para evitar todo, pero no lo hizo y ahora tiene que vivir sabiéndolo.

"[...] No siempre tomamos las decisiones correctas. Ni siquiera cuando eres un adulto y se supone que tienes que saber qué hacer. "

Jennifer L. Armentrout es una escritora que amo, aunque siempre terminan creando conflicto dentro de mí. Sus historias pueden parecer juveniles y simples, pero siempre contienen grandes mensajes. Si no hay un mañana es una historia que en un principio parecer ser otro libro más de la chica enamorada de su mejor amiga, pero Armentrout logró crear una historia completamente diferente a lo que pensaba.

Empecé el libro y en tan solo unas páginas sabía que me iba a gustar, los personajes me encantaban y nunca imaginé el giro que toma la trama y eso hizo que amara por completo el libro. Es una historia desgarradora y profunda, llena de amistad, amor, perseverancia, mucho mucho dolor y tristeza, donde se hace evidente que en la vida pueden ocurrir muchos sucesos que nos dejan huella y nos cambian, que nos pueden hacer crecer y donde podemos aprender de nuestros errores.

el estilo de la autora siempre me logra atrapar y hace que quiera seguir leyendo, sin embargo,

"-La culpa no va sobre hacer que alguien se sienta mal por sus acciones, y no va de herir los sentimientos de alguien. Las acciones y las inacciones tienen consecuencias. Si no aceptáramos la responsabilidad o la culpa de ellas, correrías el riesgo de repetir esas acciones. "

Lena fue un personaje que me encantó. Incluso cuando empezó a mostrarse apática y triste pude entenderla completamente y, más que enojada con ella con las actitudes que tenía me hacía sentir con la necesidad de entrar al libro y darle un fuerte abrazo. Tengo que decir que me sentí muy identificada con la protagonista, desde las primeras páginas donde la conocemos como una persona que ama la lectura me gustó mucho como personaje y mientras la vamos conociendo en cada capítulo no podía quitarme la sensación de sentirme muy identificada con ella. Lena es un personaje complejo que tiene tantos pensamientos que es imposible no conmoverse, siente tanto que es inevitable no sentir y llorar con ella. Lena es de esos poco personajes que no me creó ningún tipo de conflicto ni sentimiento negativo durante la lectura, porque cualquiera ha estado o puede encontrarse en la situación de Lena, así que es muy fácil sentir empatía. En esos momentos y escenas donde podemos verla deprimida y desesperanzada hicieron que me gustara más como protagonista y es que desde el principio me gustó. Armentrout logró que Lena tuviera un lado muy humano que no hace nada más que sentir y sentir. Poco a poco podemos ver como logra que cada pedazo de ella se vuelva a unir y como aprende a manejar el dolor.

Sebastian es otro personaje del libro y también me encantó. No sé como lo logra, pero siempre acabo encantada con los personajes masculinos que crea la autora . Sebastian es chico dulce, comprensivo, respetuoso, amable, buen amigo, inteligente y completamente encantador. Lo amé de principio a fin.

En el libro tenemos a otros personajes que son muy muy importantes durante toda la historia.

No puedo evitar mencionar que adoro cuando se hacen referencias literarias en los libros , encontrar con tantas referencias durante la lectura me conquistó, en especial porque se nota en cada página el amor que Lena le tiene a la lectura.

"Siempre he sido lectora, y leo mucho, por lo general libros tipo de historia romántica y el clásico felices para siempre. [...] A veces quería... no sé, escapar de la vida. Ahondar en un mundo que aborda cuestiones de la vida real para abrir los ojos, o en un mundo diferente, algo totalmente irreal. Uno con faes o vampiros itinerantes. Quería experimentar cosas nuevas y siempre, siempre, llegar a la última página sintiéndome satisfecha.

Porque a veces el felices para siempre tan solo existía en los libros que leía."

La prosa de la autora es algo que me gusta en sus libros, es fluida y te mantiene con ganas de seguir leyendo. Esta vez las ansias de continuar la lectura fueron mucho más grandes de lo que me ha sucedido con otros de sus libros. Tal vez tiene que ver con los personajes, con la pluma de Armentrout, con la trama, con los sentimientos tan intensos que me transmitía o una combinación de todos ellos, pero el libro lo acabé en un par de días y en ambos no pude dejar de llorar.

Me gustó mucho como se manejó el tema de seguir adelante, de ser resiliente, de la importancia del apoyo de la familia y de las personas que amas, de no dejar para mañana lo que puedes y quieres hacer hoy, de no dejar que tus temores o pensar en el que dirán manejen tu vida y te venzan.

Si no hay un mañana es un libro que te hace sentir, que hace que tu corazón sufra y llore, que te hace tener esperanza, que trata temas reales, duros y brutales pero que son importantes para todos, en especial para la juventud. La autora logró hacer que verdaderamente reflexiones mientras lees. Es una historia con muchas emociones y enseñanzas.