Autores: Teri Terry ISBN: 9788469601518
Editorial: Bruño
Páginas: 448
Año de publicación: 2014
Precio: 14.90 €
Kyla ha sido «reiniciada»: le han borrado la memoria y sus recuerdos se han perdido para siempre. Han hecho de ella una persona nueva, supuestamente porque era una terrorista y el Gobierno pretende darle así una segunda oportunidad.
Pero un día empieza a recordar ecos del pasado, y Kyla descubre que nada es lo que parece —ni siquiera ella misma— y que alguien miente. ¿En quién podrá confiar para alcanzar la verdad? Llega la primera parte de una trilogía distópica que puede ser escalofriantemente real.
Bienvenidos a la nueva vida de Kyla, aún se encuentra en el hospital aprendiendo todo lo que puede para ponerse al día y aprender todo lo que debería saber una chica a los dieciséis años. Muchas dudas le asaltan, pero al fin y al cabo tiene una nueva oportunidad: es una reiniciada.
Le han explicado que a los jóvenes delincuentes menores de dieciséis se les ofrece la oportunidad de ser reiniciados, borrar de su historial de su mente todos los errores que les han desplazado del comportamiento adecuado para ser un miembro útil de la comunidad.
Una familia le ha adoptado, es la segunda vez que adoptan a una reiniciada, su hermana Amy también lleva un levo en la muñeca que mide sus niveles de felicidad. Sus padres son fríos y parece que no se llevará bien con su madre que habla en su presencia como si se tratara de un jarrón. La doctora Lysander ha requisado algunos de sus dibujos, aquellos que dan salida a las imágenes de su memoria fotográfica, pero quiere seguir viéndola periódicamente porque… esta es su última oportunidad.
Poder ir al colegio le ha costado bastante para al llegar encontrar que no todos están de acuerdo con la existencia de los reiniciados ni están dispuestos a dejarlo estar. Pero también hay otros reiniciados, entre ellos Ben que con su sonrisa es capaz de hacer subir sus niveles de seguridad.
Cuando algunos de los reiniciados de su comunidad empiezan a desaparecer, Kyla comienza a cuestionarse todo lo que le rodea, los motivos para reiniciar a los adolescentes, descubre la amenaza terrorista a la que se enfrentan los ciudadanos, busca el destino de aquellos que ya no pueden ser reiniciados pero tampoco pueden pertenecer a la comunidad.
Uno de los puntos más agradables de esta novela es la narración en primera persona desde el punto de vista de la protagonista. Sabéis que no soy amante de ello, pero todo el mundo escribe así, por lo que toca adaptarse. En este caso me gustó el tono, la protagonista parece muy distante de la realidad puesto que no la conoce y a medida que se va adaptando va cambiando el discurso.
Por otra parte es un personaje curioso, como no podía ser de otra forma, y se cuestiona el motivo de casi todo lo que ocurre a su alrededor. Por el contrario su hermana Amy es un ser conformista que acepta las imposiciones sin cuestionarlas, con un comportamiento propio de una adolescente sin mucho más trasfondo.
Se va desenmarañando un conjunto de acontecimientos producidos en parte por el desconocimiento de la norma, por el miedo a desafiar a la autoridad sin ser conscientes de ello y, después, por hacer lo de forma explícita.
Es una novela de carácter puramente introductorio aligerado por la prosa amena y el ritmo constante, que no ágil, del relato. Nos introduce en un mapa político y social que nos puede resultar familiar; en el que Reino Unido se ha separado de la Unión Europea, dando lugar al nacimiento de la Coalición Central e imponiendo férreas normas de comportamiento en la población además de la tolerancia cero con las violaciones de la normativa, además de la medida de reinserción mediante la reiniciación de los jóvenes.
Ese eje de la novela que pasa de puntillas porque la protagonista no termina de captar todas las aristas del conjunto y no distingue la figura, así que puede resultar un tanto desesperante.
Por otro lado, la faceta romántica no tiene tanto protagonismo como la conspiratoria que el verdadero caldo de cultivo. Pero tampoco deja de ser tierna y entrañable, con un toque platónico que alarga la tensión.
En general es una buena introducción, sienta muy buenas bases desde dentro vemos un poco cómo se va fraguando la trama sin encontrarnos con el pastel ya horneado. En cierta forma es entretenido el cambio de los factores y aporta una pizca de frescura a lo que normalmente encontramos en novela juvenil distópica. Por otro lado es una novela que te deja a expensas de los siguientes volúmenes, esperas que vaya mucho más allá y se arriesgue más en cada entrega.