Reseña: ‘Spider-Man 2099’ #2

Publicado el 02 noviembre 2015 por Rafatos

28 Oct 2015
Escritor: Peter David
Dibujante: William Sliney
Colores: Frank D'Armata - Andres Mossa
Editor: Devin Lewis - Nick Lowe

El gran trabajo que está haciendo el tándem entre Peter David y Will Sliney con Spider-Man 2099 ha hecho de la serie una a tomar en cuenta en toda la nueva gama de Marvel. No solo ha mejorado el trabajo de su dibujante (que se beneficia de nuevos colores), el argumento creado por David es bastante superior a lo que veníamos leyendo con anterioridad.
Es así como Peter David explora un poco más las emociones de un Miguel O’Hara, que hasta ese entonces, disfrutaba su vida. No es una regla pero si una tendencia: Spider-Man no es feliz por mucho tiempo. Y esto aplica para cualquier versión de Spider-Man.
Adentrándose en el drama, este segundo número mantiene, en un inicio, el misterio por el novedoso nuevo traje. Todo en una ola de emociones que revelan un poco de lo sucedido en el final del primer número. Se trata de uno de los mejores trabajos de su dibujante desde que se encarga del personaje. Sliney ha mejorado en casi todo; ahora tiene un mayor manejo de las emociones físicas y su entintado, como el coloreado de D’Armata y Mossa, se adaptan perfecto a las circunstancias de la historia.
Esta es una de esas historias que no necesita estar cargado de acción para brillar. Pero, ah… que bueno resulta ver en acción al 2099.
El traje, bueno, no es que sea tan brillante como en las portadas pareciese. Portadas que son hermosas. Pero funciona bien. Las nuevas mejoras tendrán que ser evaluadas en el transcurso de la historia. Por ahora, me gusta, muy a secas.
Me gusta bastante el manejo de la historia, los personajes y la forma en que Peter David promueve la imagen de Miguel antes que la de Parker. Nuevamente la versión de Peter Parker se ve opacada por la de nuestro protagonista.  Al fin y al cabo de eso se trata. Estamos en Spider-Man 2099 y no en Amazing Spider-Man, aquí manda Miguel. 
Spider-Man 2099 2 brilla por el trabajo de sus realizadores. Demuestra que el personaje de Miguel O’Hara es tan atractivo como cualquier otro de la baraja arácnida. La mejoría de su dibujante le viene perfecto, más cuando el argumento se torna interesante. La serie que todo fanático de la araña debe estar siguiendo.