El joven Tristran Thorn está dispuesto a hacer cualquier cosa para conquistar el frío corazón de su amada Victoria, incluso a prometerle que le conseguirá la estrella que ambos ven caer una noche. Para cumplir su palabra, Tristran deberá cruzar el muro que separa su pueblo del País de las Hadas, un vasto territorio donde nada se parece a lo que él ha conocido, donde ni siquiera las estrellas tienen forma de estrella y donde los duendes y los espectros campan a sus anchas. En ese mágico lugar, el joven no sólo hará cambiar su futuro, sino que también descubrirá cosas de su pasado que no podía imaginar. Con la ayuda de un unicornio, un barco pirata que surca el cielo, un árbol muy sabio y una florecita de cristal... ¿conseguirá Tristran el amor de su dama?OPINIÓN:
Lo que más destaco de la novela es la narración del autor, nos cuenta los sucesos como si de un cuento clásico se tratase, haciendo participe al lector de los hechos vividos por el protagonista, de una manera sumamente atractiva y grandiosa. Es fantástico conocer todos estos seres, aquellos con los que se topa Tristran y los que aunque solo se mencionen una vez, se dibujan en nuestra mente. Es un libro muy corto que he disfrutado desde el inicio, la fantasía es mi debilidad, y la forma en que Gaiman la maneja me ha encantado y me ha hecho querer leer más del autor, cosa que sin duda haré.
Tristran, el protagonista, demuestra que siempre hay que seguir los deseos de nuestro corazón, y que cuando algo se quiere de verdad, no hay cosa o persona que impida que lo consigamos.
Como libro de fantasía lo tiene todo, criaturas típicas y algunas no tan típicas, reinos, reyes, asesinos, ladrones, brujas, y un sinfín de personajes que deleitan a todo fanático de lo fantasioso. Como ya mencioné, quedé encantado, la travesía del protagonista es muy entretenida, y el día a día de éste te provoca querer seguir leyendo y leyendo para saciar esas ganas de mundo, magia y aventuras.
Lo leí en dos días, pero me hubiera gustado que me durara más, no tanto que yo hubiera parado de leer, sino que fuera más extenso. El mundo de las Hadas me ha encantado por la cantidad de magia que se respira en sus terrenos, cómo es fácil encontrar por aquí y por allá animales que en otro momento fueron personas, desde príncipes hasta ninfas, pero que algún brujo o bruja los convirtió en eso. Hay una escena en especial donde un árbol ayuda a Tristran, y me resultó muy genial.
Una historia de fantasía para adultos, que cualquier persona puede disfrutar. Es fantásticamente entretenido, con un mundo maravilloso y descripciones fabulosas. Un monumento de magia y escenarios pintorescos, todo un deleite para el lector.
4/5