Sueños de tinta
HarperCollins / HQÑ6 Agosto 2015HistóricoIndependiente
Alice Hastings, bella y rebelde, está convencida de que nadie puede obligar a una mujer a hacer aquello que no desea. Claro que no lo tiene fácil, siendo la sobrina mimada de un vizconde, dueño de un periódico donde ella escribe incendiarios artículos con el seudónimo de J. Steward. ¿Casarse, tener hijos y asentir con una sonrisa falsa en las hipócritas cenas de la alta sociedad? Antes muerta. ¡No hay nada que Alice odie más que eso! Sí, quizás sí haya algo… Reine Clifford, el dueño del periódico conservador de la competencia. Aristócrata, insufrible, déspota… y con unos irresistibles ojos azules que parecen conocerla bien.
Raine Clifford solo tiene una idea en mente: descubrir quién es J. Steward, cuyos artículos hacen ganar a la competencia una fortuna. Esa es su única obsesión hasta que, durante la cena anual de sus padres, los condes de Deerwood, conoce a la menuda e indómita Alice Hastings. Ella le dejará claro que una mujer puede expresar claramente sus opiniones y darle en lo que más duele, su orgullo. No es decente que Alice, beligerante, instruida y comprometida con la causa sufragista aproveche cada ocasión para vociferar sobre sus principios y convicciones. Ella es lo contrario a la esposa ideal. No obstante, a partir de ese momento la obsesión de Raine se dividirá entre J. Steward y la atracción irresistible que siente por la mujer de bellos ojos almendrados y lengua afilada.
Hacía algún tiempo que tenía ganas de leer alguna de las novelas de Rowyn Oliver, mis compañeras de blog ya lo habían hecho y me recomendaban que probara su pluma. Pues bien, cuando leí la sinopsis de Sueños de tinta, reseña que os presento en esta entrada, estuve segura que era una historia hecha para mí, con una pareja protagonista que consigue que salten chispas cuando están juntos, unos personajes secundarios que enamoran y una trama apasionante sobre la igualdad y los derechos de las mujeres que todos deberíamos conocer.
Alice Hastings ha crecido rodeada de lujos bajo la tutela de sus tíos, los vizcondes de Welkins, pero esto no la ha hecho una joven mimada y caprichosa, todo lo contrario, piensa que existen demasiadas desigualdades que habría que erradicar. Aboga por una sociedad más justa con derechos para los más desfavorecidos, aunque, quizás, su mayor pasión es la defensa de la libertad de las mujeres. Cree que ninguna debería hacer lo que no desee, aunque eso signifique desobedecer a quienes dicen protegerlas. Para defender esos ideales tan revolucionarios que posee no ha encontrado otra forma que escribir artículos incendiarios bajo el seudónimo de J. Stewart en el Sunday London, el periódico que dirige su tío. Sin embargo, ahora que ha llegado a una edad casadera, la sociedad le exige encontrar un marido que la tome bajo su protección. Alice ya odia la vida que le espera de sonrisas fingidas y conversaciones hipócritas, no quiere acabar marchita con un hombre que no la valore tal y como es y tampoco ha encontrado a nadie que consiga prender la chispa que la haga sentirse viva. Solo Reine Clifford, vizconde de Deerwood, un aristócrata conservador y arrogante ha logrado sacarla de sus casillas y hacer que se olvide de las buenas formas, un hombre que parece leer su alma cuando la mira con esos penetrantes ojos azules.
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Reine Clifford, vizconde de Deerwood, solo tiene una pasión en la vida, su periódico el New London. Junto a su amigo, el marqués de Litchfield, ha levantado un diario donde defender sus comprometidas ideas. Sin embargo, no plasma en él todo lo que querría, su socio lo obliga a moderar sus pensamientos más liberales para no ser tachados de radicales y seguir agradando a la clase aristocrática. Esto lo ha llevado a ser menos competitivos y perder en ventas frente al Sunday London, que tiene en su plantilla a J. Stewart y sus espinosos artículos. Ahora encontrar al periodista se ha convertido en su mayor obsesión, pero parece que es un fantasma y nadie sabe quién es. No obstante, pronto el famoso articulista pasará a un segundo plano cuando en una cena conozca a la bella y rebelde Alice Hastings, la cual se ha propuesto volverlo totalmente loco. Es una dama indómita que desde el principio le deja claro que una mujer puede pensar y decir lo que quiera, en definitiva una feminista que siempre parece tener la última palabra. Reine sabe que esta mujer comprometida con la causa sufragista no es la adecuada para él, pero no puede dejar pasar el deseo que despierta en su interior y que lo hace sentirse vivo por primera vez en mucho tiempo.Desde el principio sabes que cuando Alice y Reine se encuentren será como el choque de dos trenes. Ambos son testarudos y orgullosos, no quieren rendirse ante el otro, aunque la atracción que sienten es más fuerte que todo. El vizconde sabe que ella es una dama inteligente y apasionada, pero con unos métodos poco ortodoxos para defender sus ideales. Ella lo tacha de déspota, pero cuando empieza a conocerlo ve en él a alguien encantador que comparte muchos de sus pensamientos. Así comienza una relación que los hará discutir cada vez que se vean, un tira y afloja donde descubrirán quiénes son y cuyas disputas avivarán una pasión abrasadora que dará paso a sentimientos mucho más profundos. Sin embargo, nuestra pareja deberá hacer frente a sus propios miedos, sus dudas y al secreto que guarda Alice si quieren alcanzar la felicidad que se les brinda.
Rowyn Oliver me ha demostrado con creces que sabe crear historias que enganchan desde su comienzo. Es una escritora magnífica que ha sabido adentrarnos en un tema que había quedado un tanto olvidado en la historia, las sufragistas y la lucha que mantuvieron para que los derechos de los que hoy en día disfrutamos las mujeres consiguieran ser una realidad. Nos ha recordado nombres que fueron importantes en la historia y ha puesto a Alice y a su amiga Mary Higgins como cabezas visibles de un movimiento que fue tachado de radical subversivo, pero que cambió la sociedad tal y como se conocía en el siglo XIX.
No obstante, no debemos olvidad que Sueños de tinta es una historia romántica donde el romance de Reine y Alice es el tema principal, dos personajes enfrentados que poco a poco van comprendiendo que tienen muchas cosas en común. Sus conversaciones tan ingeniosas y apasionadas, unidas a la manera de narrar fresca y ágil de la autora convierten su lectura en una delicia que se vuelve totalmente adictiva. Además los secundarios que rodean a nuestra pareja hacen que la trama sea dinámica, todos ellos perfectos para el desarrollo de la misma. Pero si me tengo que quedar con alguno sería con Dave Northon, marqués de Litchfield y Mary Higgins, un conservador a ultranza y una feminista sin pelos en la lengua que dejan entrever unos sentimientos contradictorios que podrían dar mucho juego en una futura novela. En definitiva, un libro maravilloso que me ha enamorado sin remedio robándome el corazón.
Sueños de tinta de Rowyn Oliver es una maravillosa y romántica novela donde sus protagonistas descubrirán que el verdadero amor puede llegar con la persona menos esperada, pero, al mismo tiempo, también es una historia sobre derechos y libertades, la lucha y el compromiso de un grupo de mujeres de diferentes clases sociales que alzaron la voz para enfrentarse a las rígidas normas de una sociedad arcaica y reivindicar lo que tanto tiempo le había sido negado.