Así que he terminado.
No más chicos.
Punto final.
Por un momento pensé que este libro podría ser de algún cliché de amor, o que me iba a dar diabetes después de leerlo, pero no es nada sobre eso. Es sobre Penny, una chica que está cansada de que los hombres con los que ha salido solo la traten como un objeto, y después la botan sin ningún remordimiento. Está cansada de estar con cretinos, por lo que decide iniciar el Club de los Corazones Solitarios, en honor a una canción de The Beatles.
Y la verdad, por la forma en la que narra, te llegas a sentir más cerca a Penny. Además que la autora lo hace de una forma bastante amena, y es una historia que prácticamente se lee sola.
Este es un libro que te habla de lo que verdaderamente vale la pena conservar en la vida. No son los novios (o las novias), que esos vienen y van, sino los amigos. Los que te van a apoyar en las buenas y en las malas, hasta el final. También, con seguir siendo fiel a ti mismo sin importar con quién estés o con quién te juntes, porque si tú no te respetas, ¿quién lo va a hacer?
Los personajes me han encantado, cada uno a su manera.
En resumen, es un libro que vale la pena leer. Tiene una historia bastante sencilla, que se lee en una tarde, con sus partes predecibles, pero que deja un buen sabor en la boca y un buen mensaje para reflexionar.