Arethusa Clayton siempre fue una mujer muy especial... acostumbrada a salirse con la suya. Ahora ya no está, pero dejó instrucciones precisas de sus últimas voluntades. En vez de ser enterrada en la acomodada Costa Este de EE.UU., donde ella y su difunto marido criaron a sus hijos, Arethusa quiere que sus cenizas se esparzan en un lugar remoto de Irlanda, concretamente en unas colinas frente al mar y junto a un castillo. Todo cuanto Arethusa le explicó a su hija Faye es que creció en el seno de una familia humilde y que dejó Irlanda, sola, para empezar una nueva vida en EE.UU., como hicieron tantas personas en tiempos de adversidades. Pero ¿quién era su familia? ¿Dónde están ahora? ¿Y quién es el misterio benefactor de una parte importante de su herencia? [...]
Ha pasado un mes desde la última vez que pasé por aquí y más tiempo incluso desde que recibí esta novela y hoy la reseño 😓 En Navidad no leí nada, después vino una mala racha personal y entre unas cosas y otras, no pude ponerme con ella hasta finales de enero, ¡y con qué ganas la cogí! Me enteré de la existencia de "Tiempo de secretos en Deverill" unas pocas semanas antes de que se publicase, y viene a ser algo así como una cuarta entrega de la saga, pasando a convertirse en una tetralogía . ¡Y yo encantada! 😍 Tenía 'miedo' de que no me gustase tanto como las otras entregas, ¡pero para nada ha sido así! La he disfrutado de principio a fin y ha sido una maravilla volver al pequeño pueblo de Ballinakelly (Irlanda) con la familia Deverill 💚
La novela se nos presenta en primera persona desde el punto de vista de Faye , de 58 años, y en ocasiones volvemos al pasado con Arethusa , su mamá, cuyos capítulos están narrados en tercera persona. Lo principal de la trama de la novela arranca al conocer las últimas voluntades de tras su fallecimiento y , decidida a descubrir la verdad y conocer los orígenes de su madre , así como sus secretos, decide embarcarse en la aventura de su vida viajando hasta Ballinakelly desde Estados Unidos, aunque a su marido no le hace ninguna gracia.
Ha sido una alegría reencontrarme con algunos de los que aparecieron en la última novela de la saga (Kitty Deverill y su esposo, sus padres, su hermano...), aunque la nostalgia por el paso del tiempo me entristeció mucho al recordar la primera novela y ver lo mucho que todo había cambiado... Y, obviamente, tenemos nuevas incorporaciones , como es el caso de la familia de Faye, en especial su hermano, su esposo y sus tres hijos, o , un misterioso hombre que será un gran apoyo para en tierras desconocidas. Y del pasado de me quedaría, definitivamente, con , su institutriz 😊
Me reafirmo al decir que Santa Montefiore tiene un don creando y perfilando personajes, y es que, pese a ser tantos, están muy bien trabajados y construidos, llegando a ser muy humanos y cercanos. Es tan fácil encariñarse con ellos (salvo contadas excepciones, como el marido de Faye, ejem) y empatizar con ellos ... Con respecto a las protagonistas, reconozco que llegué a sentir más empatía por , la mamá, que por su hija , aunque he tenido el corazón dividido casi constantemente y aun así ambas me han parecido magníficas protagonistas y personajes, muy fuertes y decididas, dispuestas a salirse con la suya 💜
"-No viviremos para siempre -dice sin mirarme-. Nuestras vidas no son más que un parpadeo del tiempo. Por eso tenemos que aprovechar el momento. -Me mira y sonríe-."
trama es un ir y venir de secretos y confesiones, de escarceos románticos, de familia, de amistad, de amor ... Como comentaba antes, se alternan presente y pasado, con y como protagonistas respectivamente, y he llegado a sentir la esencia de las tres primeras novelas en esta cuarta entrega, algo que temía no encontrar porque no tenía ni idea de por dónde podrían ir los tiros, y hasta que no explican quién es Faye y qué relación tiene con la familia Deverill no fui capaz de ir sobre seguro y sumergirme de verdad en la lectura (tranquilidad, que esto se conoce casi al principio).
La tercera entrega , "El último secreto de los Deverill" , nos transportó hasta el año 1939 y esta cuarta entrega nos lleva hasta el año 1960 , unos cuantos años después, por lo que el contexto histórico , como es de suponer, cambia bastante . Aun así, por muchas novelas más que publique la autora, la ambientación será siempre uno de los aspectos que siempre destacaré y más me gustarán, tanto por la época como por el lugar.
Otro aspecto a destacar muy positivamente es la pluma de la autora, tan delicada y a la vez sencilla . Me sigue encantando su forma de hilar subtramas y conectar unos personajes con otros sin que el lector pierda el hilo en ningún momento. Esto mismo hace que la novela se vuelva impredecible gracias, también, a las sorpresas y giros con que nos sorprende. ¿Y qué decir de la parte romántica? Tierna y dulce a partes iguales, aunque con sus idas y venidas, como es de esperar en cualquier romance.
Con un estilo descriptivo y detallista, sencillo, bonito, emotivo y alejado de lo juvenil, Santa Montefiore entreteje una novela que no necesita de grandes dosis de acción para que enganche y atrape desde las primeras páginas . Además, los capítulos son de extensión variable (de unas ocho o diez páginas de media) y hay bastante diálogo, por lo que el ritmo de lectura es pausado por los acontecimientos narrados, pero a la vez ágil y ameno por lo mucho que engancha la novela.
Y ya, para terminar, comentar que final puso el broche de oro a esta maravilla de historia 😍 La trama en sí es impredecible, y aunque me esperaba lo que ocurre en las últimas páginas, reconozco que aun así el final me encantó. Es perfecto en su más sentido literal , y así, como curiosidad, la autora comenta al final de la novela que tiene más ideas relacionadas con esta familia y esta historia , así que aunque ahora mismo tenga entre manos otro proyecto, no descarta volver al castillo Deverill en un futuro 😭 De verdad..., si os gustan las sagas familiares, Irlanda y un poco de histórica y romance, deberíais darle una oportunidad a los Deverill. ¡Os van a encantar! 💚