Autor: Steve Cavanagh
Editorial: Roca editorial
Número de páginas: 384
ISBN: 9788417541163
Precio: 19 €
Puntuación: 7,5
EL ASESINO NO ESTÁ EN EL BANQUILLO DE LOS ACUSADOS... ESTÁ ENTRE EL JURADO
El asesinato no fue la parte más complicada. Fue tan solo el inicio del juego.
Joshua Kane se ha estado preparando toda su vida para este momento. Él ya lo había hecho anteriormente. Pero esta vez será la más importante. Este es el juicio por asesinato del siglo. Y Kane ha asesinado para obtener el mejor asiento en la sala.
Pero hay alguien a su acecho. Alguien que sospecha que el asesino no es el acusado. Kane sabe que el tiempo se agota y lo único que quiere es el veredicto de la condena antes de ser descubierto.
Trece, de Steve Canavagh, es un thriller bastante diferente a lo que he leído últimamente de este género. Todo el libro transcurre durante el juicio del famoso actor de Hollywood Bobby Solomon: acusado de haber matado a su mujer y a un hombre, parece que todas las pruebas apuntan a que es culpable. Sólo su abogado defensor, Eddie Flynn, está convencido de su inocencia, y de que tiene que haber otra explicación para el asesinato.
Una de las cosas que más me gustaron de este libro es ver todo el proceso judicial. Las estrategias y los tejemanejes de los abogados, el proceso de selección del jurado, los discursos y los argumentos a favor y en contra de las pruebas... Esto hizo que me recordara mucho a películas como Doce hombres sin piedad o Anatomía de un asesinato. Nunca había leído un thriller legal, y lo he disfrutado muchísimo, porque se hace de lo más entretenido.
El otro punto original que tiene Trece es que el lector sabe desde el principio que Bobby Solomon no es el asesino, sino que el verdadero asesino está infiltrado entre el jurado. El libro está narrado desde el punto de vista de Eddie Flynn y también desde el de Kane, este criminal profundamente inteligente, que no siente dolor y que parece tenerlo todo calculado. Con ambos puntos de vista, el lector puede disfrutar de esta carrera a contrarreloj, de esta especie de enfrentamiento indirecto entre Flynn y Kane: el primero, sospechoso de que el verdadero asesino anda suelto, y el segundo intentando que el juicio vaya en la dirección que él quiere. Es una especie de partida de ajedrez mental entre los dos, y a mí me ha encantado.
Ambos personajes son fascinantes. Kane, como psicópata, está genialmente creado y el lector no puede dejar de asombrarse ante su ingenio y lo bien pensado que lo tiene todo. Durante sus capítulos, uno siempre se está preguntando cuál será su próximo movimiento, qué es lo que tiene planeado. Flynn se nota que es un personaje que forma parte de una saga. Aunque creo que el libro se puede leer perfectamente sin haber leído los anteriores, se nota que Flynn tiene un pasado complejo y que ha pasado por muchas cosas, que es un personaje con muchas capas detrás y que no es suficiente sólo con este libro para conocerlo en su totalidad.
Este thriller se lee en un suspiro. Las páginas se pasan solas, el juicio se hace muy ameno y logra mantener la tensión y la intriga del lector todo el tiempo. ¿Quién ganará el juicio? ¿Cuáles son las verdaderas intenciones de Kane? ¿Qué es lo que realmente quiere? Para mí esto es lo mejor del libro, aunque también cuenta con alguna sorpresa a lo largo de la trama. El final es el cumbre de la tensión y de la acción, y no decepciona en absoluto en ese sentido. Realmente no es lo que más destacaría del libro, ya que, aunque sí que hay algún elemento inesperado, creo que el punto fuerte de Trece es construir tensión durante toda la historia más que construir un final que deje con la boca abierta.
En resumen: Trece es un libro que me ha hecho pasar más que un buen rato. Es un libro muy sólido en todos sus aspectos, que resulta especialmente interesante por mostrar al completo el proceso judicial, que cuenta con un asesino frío y calculador y que te mantiene enganchando y en tensión durante todo momento.