Reseña: Una llama entre cenizas (Sabaa Tahir)

Publicado el 16 noviembre 2015 por Tatyana
¡Buenos días, estrellados!
Para empezar bien la semana os dejo con la reseña de un libro que ha cautivado a millones de lectores, entre ellos yo ;)
FICHA TÉCNICA:

Título: Una llama entre cenizas
Título original: An Ember in the Ashes
Autor/a: Sabaa Tahir
Editorial: Montena
Páginas: 448
Encuadernación: Tapa blanda con solapas
Fecha de Publicación: 03/Septiembre/2015
ISBN: 9788490434727
Precio: 17’95€
EVALUACIÓN DE CONTENIDOS:
-Amor: **
-Intriga: *****
-Amistad: ***
-Familia: ***
-Acción: ****

SINOPSIS:
En un mundo regido por la ley marcial de la Roma Antigua, el precio de la desobediencia es la muerte. Laia y su familia sobreviven en los callejones más pobres, sin cuestionar el orden establecido. Han visto lo que les pasa a quienes se atreven a desafiarlo. Cuando encarcelen a su hermano por traición, Laia se verá obligada a acudir a la resistencia. A cambio de su ayuda, deberá espiar para ellos en la Academia Militar. Allí conocerá a Elias, el soldado más prometedor del Imperio y también su mayor opositor. Laia es esclava, Elias es soldado. Ninguno de los dos es libre. Solo uniendo sus destinos podrían cambiar el de todos.
OPINIÓN PERSONAL:
Esta historia fue una de las que cogí con muchas ganas por todo el bombo que se le había dado. Decían que tenía un poco de unos libros maravillosos, y todo de él invitaba a ser devorado en cuestión de segundos. Eso fue lo que me ocurrió a mí. Me enganché a su lectura. Aunque sí tengo que decir que no es tanto como lo describen, al menos a mí no me lo pareció. Fui con unas expectativas demasiado altas deseando encontrarme todo lo que prometían, y sí que me lo encontré pero en pequeñas cantidades. Creo que brilla por sí mismo sin necesidad de asimilarlo a otros libros.
La trama comienza siendo contada a través de Laia, la protagonista femenina, y leemos como en cuestión de segundos su vida que parecía segura y agradable, da un giro de 180 grados y se ve despojada de todo lo que ama. Ahí es cuando se dará cuenta de la verdadera personalidad que tiene. El siguiente capítulo es redactado por Elias, el protagonista masculino. Y es que su ser está atrapado en una sociedad y un destino que no quiere para nada. Si fuera por él huiría de todo eso. Pues este personaje nos podría parecer a primera vista que es el que menos penurias va a pasar, pero todo lo contrario...
“-Hummm. Sí, te pega hacer mermelada.
-¿Sí? ¿Por qué?
Me sonríe, mirándome. De cerca, sus ojos son casi negros, sobre todo por las sombras que proyectan sus largas pestañas. Ahora mismo brillas de la risa apenas reprimida.
-Porque eres muy dulce -contesta con voz empalagosa.
Su mirada traviesa me hace olvidar, por un instante, que soy una esclava, que mi hermano está en la cárcel y que todos mis seres queridos han muerto. Me sale la risa a borbotones, como una canción, y se me salen las lágrimas. Se me escapa un ronquido, lo que hace que mi compañero de baile se ría también, lo que hace que yo me ría con más ganas. Solo Darin es capaz de hacerme reír así. Este alivio es desconocido y familiar, como cuando lloras, pero sin el dolor.”
(Laia y …)

Laia me ha parecido un personaje muy conseguido puesto que no se hace la fuerte, ni la valiente ni nada de eso. Sino que ella misma se da cuenta de que carece de todas esas cualidades, y que por el contrario, dispone de una cobardía que no para de repetirse. Me ha parecido muy real y aunque sus capítulos tenían menos acción, han sido de los que más he disfrutado. Y no coincido con ella en que no es valiente, pasar por todo lo que pasa requiere de una gran valentía.
Con Elias también he disfrutado, antes de leer la historia me lo imaginaba como un “chulo”, pero que va. Todo lo contrario. No quiere nada de lo que tiene, y está en contra de la sociedad a la que pertenece. He disfrutado de sus capítulos cargados de acción pero también de emoción.
Hay varios personajes secundarios, de algunos me he quedado con ganas de saber mucho más, como por ejemplo de Keenan, un resistente que al principio parece odiar a Laia pero que con el tiempo su actitud cambia a una un poco más cariñosa.
Y un personaje que aparece mucho también es Helene, amiga inseparable de Elias y la cual oculta muchas cosas pero entre ellas, sus sentimientos por su amigo. Este personaje me ha dejado con sensaciones contradictorias, a veces me gustaba, y otras la odiaba. Aunque he de reconocer que tiene muchísimo coraje.
La trama está muy bien hilada, me sorprendió muy gratamente todo de ella, hasta a quién le pertenecía ser “una llama entre cenizas”. El destino está muy presente en la vida de estos personajes, y es un no parar de sucesos y emociones. No había acabado una cosa y ya estaba comenzando otra. Me quedé sumamente enganchada a la historia, queriendo saber más y más, queriendo vivirlo todo al máximo. La ambientación está muy currada y te metes de lleno en lo que los personajes sufren.
La narración es muy amena aún cuando no le sobra detalle alguno, y la escritura de Sabaa Tahir te atrapa y no te suelta hasta que ella no quiere. Te lo cuenta todo exactamente como debe de ser, sin edulcorar las escenas crueles y violentas, y explicándote en pocos pero precisos pasos cómo es la sociedad.
El amor se da en pequeñas pinceladas y antes de leer el libro me imaginé quienes lo protagonizarían, pero una vez más la autora nos ha querido dar una vuelta de tuerca y a la vez que los personajes se confunden por sus sentimientos, también lo hacemos nosotros. Me ha gustado el poco romance presente, y como yo soy tan romántica he amado cada escena en la que se le daba una poca importancia. Eso sí, me he quedado con ganas de más, sobre todo de una “pareja” en particular.
“-Puede que no tengamos que ser esclava académica y máscara-digo, soltando la daga-. Por esta noche podríamos ser tan solo Laia y Elias.
Envalentonada, le tiro del borde de la máscara, que nunca ha parecido formar parte de él. Se resiste, pero ahora quiero quitársela, quiero ver el rostro del chico del que llevamos hablando toda la noche, no del máscara por el que siempre lo había tomado. Así que tiro más fuerte y la máscara me cae en las manos dejando escapar un siseo. La parte de atrás está repleta de afilados pinchos manchados de sangre. El tatuaje de su cuello brilla, marcado por una docena de diminutas heridas.
-Lo siento -le digo-. No sabía...
Me mira a los ojos y algo indefinido arde en su mirada, una chispa de emoción que me prende un fuego distinto en la piel.
-Me alegro de que me la hayas quitado.
Debería apartar la vista. No puedo. Sus ojos no se parecen en nada a los de su madre. Los de ella son de un gris frágil, como de cristales rotos, mientras que los de Elias, con ese marco de pestañas oscuras, son de un tono más intenso, como el corazón de una nube de tormenta. Me atraen, me hipnotizan, se niegan a liberarme. Vacilante, acerco los dedos a su piel. La barba incipiente me roza la palma de la mano.”
(Laia y Elias
)
El final me ha dejado con ganas de mucho más. Se nos presenta con tramas abiertas por todos lados, ya que en esta primera parte se han cerrado muy pocas por no decir ninguna. Me muero por saber qué ocurrirá en la segunda parte porque el destino de los personajes principales y algunos secundarios se queda colgando de un hilo. Y aunque te das cuenta de cómo han ido evolucionando los personajes a lo largo de la historia, al final te sigue sorprendiendo sus sucesos y elecciones. Me quedé plasmada y necesito su segunda parte enseguida.
Una llama entre cenizas es un libro diferente y auténtico, que tiene de todo y más para que quedes atrapado en sus páginas. Con una trama exquisita en la que sus personajes nunca apagarán la llama de la esperanza, por muy mal que se les presente todo.
PUNTUACIÓN:

Me ha gustado Mucho, Mucho!!
Muchísimas gracias a Montena por el envío.