Título: Y tú no regresaste
Autor: Marceline Loridan-Ives
Género: Biografía, Holocausto
Páginas: 92
Editorial: Salamandra
Ficha
Sinopsis:
A los ochenta y seis años, Marceline Loridan-Ivens ha volcado en esta carta abierta a su padre un cúmulo de sentimientos profundamente arraigados desde su juventud, de los que ha sido incapaz de desprenderse durante toda una vida.«Tú podrás regresar, porque eres joven, pero yo ya no volveré.» Esta simple frase, que Marceline oyó de boca de su padre cuando eran deportados en el mismo tren al campo de Auschwitz-Birkenau en abril de 1943, quedó grabada en su memoria para siempre y es el origen de este relato extraordinario.
Después de leer Anna Frank, me costó un triunfo poder hacer una reseña objetiva y sin puntuación, me dije que nunca más volvería a hacer una parecida. Creo que piezas como ésas son de un valor histórico y humano de valor incalculable, pero como se suele decir "no digas nunca", y es que hoy os traigo otra obra de la segunda guerra mundial: Y tú no regresaste.
La autora, con ayuda de una periodista ha plasmado su biografía, en una increíbles e intensas noventa y seis páginas. Describe cómo capturaron tanto a ella como a su padre, cuando intentaban escapar. Cómo les llevaron a los campos de concentración, cómo les separaron, su padre le dijo "Yo no regresaré...", y esto se hizo realidad.Todos estos libros dejan una marca en ti, es imposible negarse, y es que este libro no tiene un ápice de sentimentalismo, o de querer tu compasión acerca de su historia. Marceline narra los hechos con una naturalidad y frivolidad asombrosa, que te hiela a la vez que lees su desgarrador relato.
Uno se congelaba por dentro para no morir.Es increíble la lucha del ser humano. Es alucinante ver cómo hay personas que resisten todo tipo de atrocidades por sus seres queridos. Es escalofriante indagar un poco lo que sufrieron allí. Pero sobre todo es alentador ver honrar a alguien la memoria de todos aquellos que no pudieron salir, y de conocer un poco más algo que al terminar la guerra parece ser que todo el mundo olvidó: las secuelas.
No éramos mujeres ni hombres en aquel lugar. Éramos la maldita raza judía. Solo nos desnudaban para determinar el momento de entregarnos a la muerte.Bravo a la autora, por dejarse leer por dentro, aunque solo sea una ínfima parte de todo lo que ha padecido en su vida. Señores y señoras, estamos ante una obra maestra, que al menos yo no olvidaré.
Gracias a Boolino por el ejemplar
Sí, así es. Y os pido millones de disculpas pero... ¡ahora trabajo! Sí, por fin me cogieron para trabajar los fines de semana. Entre la uni, y los millones de prácticas que mandan cada semana, y el trabajo ahora, leo muy poquito. Ya que tengo otros hobbies, y el tiempo no da más de sí. Así que intentaré hacer al menos dos entradas al mes a partir de ahora.¡Y traigo novedades!Estad atent@s, porque muy pronto habrá un sorteo en el blog :)Y no digo nada más jaja, ¡pasad un genial finde!♥