El respeto hay que ganárselo, no se impone. El miedo sí. El respeto es un sentimiento que tiene que ver con algo mutuo, que no admite trampas y torcimientos para que entre por el ojo de la aguja lo gigantesco.
En el fondo ¿de qué se trata? de mostrar el poder de la derechona, su inmenso poder. La financiación del PP? Intocable. El prestigio de la derechona que paga y hace sus negocios, sucios, con ellos? No se toca. Revisar la situación macabra de decenas de miles de muertos por cunetas y pozos, sin enterrar por sus familiares? Ni hablar del peluquín, no vaya a ser que condenen al franquismo por crímenes contra la humanidad y menuda papeleta para sus herederos, papeleta moral y económica. Incluso mira que si revisando sale a colación las prácticas nazis de investigación humana que se hicieron aquí, o la participación eclesial en muchas muertes y persecución o en el tráfico de los niños que generó redes que luego continuaron hasta mucho tiempo después.
No, gentes del exterior, miren ustedes, esto es España y la derechona siempre tuvo mucho poder, ahora en formato franquista, neofranquista, derechista, ultra, etc. cometiendo uno de sus típicos actos demostración de fuerza, a tope, hay que meter el miedo en el cuerpo, bien profundo, para que a nadie se le ocurra protestar.
Qué asco, que mierda, que inmenso odio siembran.