El partidismo político tiene sus raíces en los procesos afectivos, fisiológicos que causan a los partidarios sobre políticas y cuestiones, independientemente del contenido de la política, según muestra una investigación
El partidismo político tiene sus raíces en los procesos afectivos, fisiológicos que causan a los partidarios sobre políticas y cuestiones, independientemente del contenido de la política, según muestra una investigación