Restaurant Raco de la Vila en Barcelona, una cena casi perfecta

Publicado el 29 septiembre 2011 por Heltroger

Habia volado a Barcelona en una visita de trabajo, al final de la jornada ya estaba necesitado de mimar mi cuerpo, me fui en un taxi hasta el hotel y a esa hora el recorrido se me hizo eterno, mi hotel el Barcelona 4 que aunque queda en cercanias del puerto olimpico esta en un sector un tanto gris de la ciudad, pase por el comedor del hotel y solo me dierón ganas de salir corriendo, segui de frente y a unos 200 metros vi un restaurante con una pegatina en la ventana de la Guia Michelin, me asome y habia un par de comensales en la barra tomando una cerveza en una copa grande y atractiva, el sitio estaba concurrido y asi que pedi una cerveza, como el encargado se nego a ello, no me quedo mas remedio que entregarme y me acomodarón en una mesa, aunque iba solo me dierón una de cuatro puestos, al frente mio estaba un hombre prepotente bebiendo Whisky Cutty Sark con Coca Cola acompañado de dos que se notaban que eran sus subordinados y el tio hablaba sin parar, ahora si me trajerón la cerveza y me refresque, entusiasmado con el pan y el aceite, ordene de entrada Espárragos Blancos de Navarra con Jamón de Jabugo, fenomenal, el Vino que me toco en suerte porque como que no habia mas fue ½ botella de Viña Mayor de Ribera del Duero, la botella de agua, el vino y la cerveza la sirvierón en la misma clase de copa, el aroma del vino se perdia por el diseño de la misma, fue una pena, el Arroz Caldozo con Bogavante Gallego estaba en su punto y el hombre de la mesa del frente seguia con su monologo sobre la crisis sin para ni respirar, parecia que vivia del ladrillo, que tio tan pesimista, yo comia despacio lamiendome literalmente los dedos, engulli todo lo ordenado y el deleite alcanzo cotas supremas, tome el postre pedi la cuenta, pague ,ya me iba a marchar cuando algo me dio por acercarme al patan de la mesa de enfrente, con mis nudillos golpee la mesa, me miro sorprendido por la interrupción de su diatriba que la tenia muy ensayada y le dije indignado USTED OPACO UNA CENA MARAVILOSA CON SU NEGATIVISMO; me di la vuelta y sali sin mirar atras,

Corolario: En los buenos restaurantes les deberian prohibir la entrada a los amargados, a los pesimistas, a los negativos y los que tienen mala leche.