Restaurante del Green Park Hotel 4 Estrellas en Focsani (Rumanía)

Restaurante del Green Park Hotel 4 estrellas en Focsani (Rumanía)
Situado en Bulevardul Gării, 6 de la localidad de Focsani, en la provincia de Vrancea. Espectacular casa tradicional de construcción típica rumana del siglo XIX. Antigua casa de escritor famoso, transformada en un hotel de 4 estrellas y con servicio de restaurante de alta cocina tradicional. Conjunto muy coqueto y familiar con modernas instalaciones, habitaciones amplias, elegantes y servicio muy profesional en general, pese a que el idioma de comunicación sigue sin duda a ser un gran handicap, debido a que muy poca gente sabe todavía a día de hoy hablar inglés y claro, no es tan fácil que los visitantes sepan todos hablar la lengua local. Pero señalar que tanto el recepcionista como el cocinero, todos ellos muy amables, prestaron inmensa ayuda para facilitarnos nuestra estancia. Durante los dos días que estuve en esta localidad situada a 150 kms al norte de la capital Bucarest y que por motivos de trabajo pude conocer con más profundidad su gastronomía y la calidez humana de gente de esta región, detalle por cierto tan opuesto a su gélido clima que nos acompañó durante nuestra estancia, junto a la nieve de los Montes Cárpatos que presidió y atestiguo nuestra estancia durante los días 22 y 23 de Abril 2015.


Como conocer la gastronomía local siempre es un atractivo a la hora de viajar, esta vez no iba a ser menos, aunque como citado anteriormente, nuestra comunicación inicial con el camarero nos resulta casi imposible, por este motivo al los pocos minutos, el amable cocinero se prestó a atender nuestra mesa y a solventar todas las dudas que nos llegaron a la cabeza, ya que no es fácil primero saber interpretar una carta que no está en tu idioma, aunque si que estaba traducida entre lineas en Inglés... Pero tampoco a demás es fácil acertar, cuando uno viaje por primera vez a una país y por supuesto quiere probar lo más representativo y característico de sus fogones, por este motivo, al final, lo mejor es siempre dejarse llevar por la sugerencias de la casa.
 

Después de ojear su muy extensa carta y dudar profundamente sobre que platos tomar, finalmente la decisión fue prestada, por los consejos de nuestro embajador y nos dejamos plenamente llevar por sus sugerencias y que finalmente de manera muy acertada supieron seducir nuestros paladares.

Para abrir boca, pudimos descubrir una variada selección de quesos locales, elaborados a partir de leche de cabra, de vaca y de oveja, todos ellos poco curados, frescos con buena acidez y muy alta intensidad de sabor, acompañados de nueces, manzana y orejones (o también conocidos como albaricoques secos). Ideal para abrir el apetito y conocer una nueva faceta típica de esta región.

Pero claro, como las buenas costumbres no se deben perder y en la gastronomía española, un buen queso siempre debería ir acompañado de un buen jamón, pues osamos a pedir al camarero su homólogo en este país. Por tal motivo y aprovechando la gran influencia que ejerce en Rumanía, las costumbres italianas, no tuvimos más alternativas que saborear un buen Prosciutto con melón.

 

El plato principal que voy a describir a continuación, corresponde a dos diferentes comidas, ya que al día siguiente antes de partir para el aeropuerto, pedimos comer un poco para marchar con la tripa llena, entonces ese es el motivo por el cual para la cena del día 22 de Abril 2015 descrita en este post tome un tierno, jugoso y muy sabroso solomillo de buey, acompañado por una deliciosa salsa de champiñones y todo ello sobre un muy acertado risotto con setas perfumado al romero... Y aprovecho este mismo artículo para incluir el único plato que tome al mediodía del 23 de Abril 2015, y poder así registrar ambos platos de una misma vez y poder recordar para la posteridad, unas deliciosos Costillas de Cordero Asadas con una deliciosa salsa de Miel y Mostaza con hierbas aromáticas locales, el cual francamente me supo a muy poco.

Para terminar este post, solamente me queda describir a rasgos generales el vino tomado. Elaborado por un productor local llamado Crama Girboiu. Vino Tinto Cosecha 2009 con uvas Cabernet Sauvignon y Merlot, criado en barrica de roble francés durante 10 meses. Vino de capa alta con borde violáceo, nariz intensa muy espaciado con carga frutal notable pero que queda algo de fondo, en boca es graso, buena acidez, peso en boca corto y post gusto medio. Estilo de vino muy diferente a los que tenemos costumbre de encontrar en Europa Occidental, ya que se hecha en falta más fruta. Aunque no dejemos de lado que cada país y cada región de producción cuenta con diversos factores tanto de suelo como de clima... llamado "terroir"... por eso la grandeza del vino es tal, que siempre nos va a permitir encontrar una amplia variedad de factores al rededor del mundo que siempre se va finalmente a traducir en matices dispares que finalmente encontraremos en la copa.