Restaurante El Buen Yantar, Ávila (España)
Situado en el nº 1 de la calle Vallespín, con una amplia terraza habilitada en la plaza del mercado chico, situada a escasos metros del local, en la misma plaza de esta histórica ciudad amurallada, en el que pude disfrutar de la afamada gastronomía local, a mi paso por esta recomendable ciudad, durante el Domingo 11 de Octubre 2015. En su interior, cuenta con una decoración rústica de dos alturas muy funcional y dos salones comedores muy acogedores aunque poco decorados.
No es fácil encontrar sitios que te lleguen a sorprender tanto como este lugar. Supongo que antes de elegir un sitio, me pasa lo mismo que a todos, y es que siempre nos gusta encontrar esos chollos que ofrezcan esas 3 "B" de bueno, bonito y barato... y claro está, uno no se puede exclusivamente guiar por las opiniones de otros comensales que hayan estado anteriormente comiendo en este local o en otros. Por defender un poco al restaurador, un mal día lo puede tener cualquiera, y una mala crítica no es suficiente para tirar por los suelos el trabajo de la gente. Dicho esto, quiero solamente justificar que antes de viajar, pude leer varias opiniones de numerosos restaurantes por Internet sin llegar a recordar ninguna opinión, ni crítica ni valoración, sobre este restaurante y al final, me dejé llevar por las recomendaciones de la gente del pueblo, por su precio y por su muy atractiva oferta publicada en un enorme cartel en la misma plaza. Una vez decidido el sitio, lo primero fue ir a reserva la mesa y la primera grata sorpresa fue ver que el local estaba completamente lleno, sin duda un buena señal., por la cual con algo de suerte pudimos finalmente conseguir una mesa y pasadas las 15h30 logramos sentarnos a comer.
No cabe duda que la comida castellana es singular, muy apreciada y debe ir siempre acompañada de un buen vino de la tierra. Este vino de la casa que entraba en el menú estuvo a la altura, sin ser nada del otro mundo resultó ser un buen vino tinto joven, con una graduación de 14% con buenos aromas frutales, buen cuerpo y paso por boca agradable.
Rápidamente fuimos atendidos por unos camareros muy acostumbrados a trabajar con mucho ritmo sin perder la sonrisa y dando buen trato a sus clientes. Entre los 16 distintos entrantes que habían para elegir, tuvimos que decantarnos por únicamente 2 platos por pareja, y entre tanto surtido finalmente pedimos una ensalada con queso de cabra y frutos secos, citar nuestra sorpresa cuando vinos los cacahuetes, lo cuales aportaban un sabor singular al tomate... y una excelente cazuela con huevos, patata y Jamón.
Este último nos gustó mucho, ya que el jamón empleado para este plato estaba delicioso, las patas crujientes y todo el conjunto mezclado con los huevos , estaba de "toma pan y moja". Seguidamente, después de abrir boca con estos entrantes, llegó la hora de dar cuentas del plato principal que veníamos buscando con tanto interés.
Quien no ha oído nunca hablar de los famosos Chuletones de Ávila?
Pues no quisimos perdernos tal manjar ni experiencia, y vaya que acierto haber encontrado este restaurante para el disfrute de nuestro paladar. Una pieza trinchada de casi 750 grs para compartir entre dos. Una carne jugosa, muy sabrosa, con una textura delicada y tierna... sencillamente delicioso
Después de semejante acopio, llegaba el turno del postre y lo mejor para rebajar fue tomar una pieza de fruta natural, la cual permitió refrescarnos y nos ayudó seriamente a digerir esta tan inolvidable comida. Es cierto que mucho restaurante de esta localidad, ofertan la posibilidad de comer esta famosa pieza de carne, pero después de callejear durante casi 3 horas y de poder comparar las cartas de los múltiples restaurantes afincados en el casco antiguo, nuestro trabajo de búsqueda dio finalmente sus frutos y pudimos convencernos de nuestro gran acierto al encontrar "El Buen Yantar". Por su precio, por su servicio y por la calidad de su cocina, la próxima vez que pueda volver a Ávila, volveré ciegamente a sentarme a su mesa.