Esta situado a pocos metros de la salida de metro de Lavapiés, bordeamos la plaza, subimos una calle y ahí esta. Si habéis ido a cenar por Lavapies sabreís la amplía oferta de sitios para cenar que hay. Las calles se llenan de gente que os invita a sentaros en sus terrazas para cenar. Nosotros elegimos este sitio porque el camarero nos invitó a una cerveza del país suave y de muy buen sabor llamada COBRA, una para cada uno mientras esperabamos a que nos montasen la mesa. Hay que aprovechar cualquier oferta que te hagan.
Mientras eliges que comer te ponen una bandeja con una especie de tortas con salsas especiadas que están realmente ricas. La carta que dispone es bastante completa. Ofrecen muchos platos típicos de la cocina hindú. La verdad que no sabíamos que elegir al ver tantas opciones y menos cuando suenan tan bien. Al final de la carta hay varias ofertas de menú para varios comensales compuestas por 3 platos y postre normalmente. A parte destacar que hay una amplía oferta de platos vegetarianos que vienen perfectos para los que no comen carne. Nosotros decidimos comer platos sueltos porque no ibamos con tanta hambre. La verdad que todos quedamos muy muy satisfechos con lo que pedimos. Pollo, curry, arroz, ... todo buenisimo y la atención de los camareros también muy buena. De postre nos decidimos por un batido de mango muy rico. Muy recomendado sin duda.
Para despedir la cena nos invitaron a un chupito que siempre es de agradecer para irte con un buen sabor de boca.
El coste de la cena bastante bien. Es un sitio barato teniendo en cuenta que estabamos sentados en la terraza y en uno de los barrios más étnicos y con encanto de Madrid.