Después de estar dando vueltas por 20 minutos por todo San Francisco finalmente llegamos a este restaurante italiano el cual resultó ser una grata sorpresa.
El ambiente es acogedor y considero que la iluminación juega un papel muy importante. Muchos pensarían que las sillas de plástico le pueden restar un poco de calidez al lugar pero en lo personal no me molestaron en lo absoluto.
Fondue de Berenjenas
De entrada pedimos un Fondue de Berenjenas. Las berenjenas vienen rellenas de queso mozzarella, una salsa de tomate y albahaca. Delicioso, un toque delicado para empezar aunque tuvimos que corregir la sal. También pedimos un Carpaccio de Atún en que todos concordamos que le faltaba sazón. Para acompañar la comida pedimos un vino delicioso, un tinto italiano de la Famiglia Marrone llamado Tartufo Nero. 100% recomendado!.Spaguetti de Langostinos y aceite de Peperoncini
Ñoquis de Papas con Calamares
Los platos fuertes fueron una gran sorpresa ya que todos estuvieron muy bien ejecutados y en su punto. La pasta Frutti di Mare estaba delicioso al igual que la pasta con Langostinos al cual le puse aceite de peperoncino que le dio el toque que le hacía falta. Unos Ñoquis de Papas con calamares estuvieron muy buenos con una sazón exquisita.Panna Cotta con diferentes salsas.
Cheesecake de Ricotta
Los postres ni hablar. Las Panna Cotta con unas salsas de blueberries, chocolate con almendras fileteadas, zanahoria y miel de cardamomo estuvieron muy buenas pero sin duda la estrella de la noche fue un Cheesecake de Ricotta que vino con una salsa de Blueberries que lo hizo totalmente irresistible.