Este verano no sólo hemos estado de vacaciones en la playa, también hemos pasado unos días de turismo rural, y uno de los pueblos que hemos visitado es Sigüenza, en la provincia de Guadalajara.
Sigüenza es conocida por su castillo medieval, convertido ahora en Parador Nacional, su gran catedral, la famosa escultura del Doncel y sus bonitas calles empedradas.
La gastronomía de Sigüenza se basa en platos tradicionales como el cabrito, el cordero asado, las migas, los torreznos… productos de caza y de matanza y dulces típicos de la zona.
Nosotros hicimos noche en el Parador, en la parte alta de Sigüenza y para cenar elegimos ir a NÖLA.
NÖLA es un restaurante pequeño, moderno, diferente al clásico mesón o tasca que te esperas en un pueblo como Sigüenza. Elegimos NÖLA por sus buenas críticas en Internet, por sus platos que unen modernidad con tradición, por el curriculum de Jorge Maestro, chef de NÖLA y por su buena relación calidad-precio.
Por la mañana, tras desayunar, nos acercamos a NÖLA para reservar mesa, ya que está muy solicitado y para comentarles en persona mi condición de celíaca. Nos atendió un chico joven muy agradable que me aseguró, tras preguntar en cocina, que no habría ningún problema con los platos y que no podía garantizar que hubiera pan sin gluten esa misma noche, ya que justo se les había terminado el día anterior. No me importó lo del pan (porque siempre llevo opciones en la maleta) y aún así reservamos.
Una vez que llegamos a NÖLA para cenar, mi sorpresa fue que sí tenían pan sin gluten, un pan que según me explicaron elaboran ellos de manera artesanal y que hicieron esa misma tarde para no dejarme sin él.
No es la primera vez que recalco lo mucho que los celíacos agradecemos un pan sin gluten elaborado y no comprado ya prefabricado; deciros que casi no dejo ni las migas. ;)
Esta vez no elegimos menú degustación, pedimos a la carta en función de los platos que son aptos para celíacos.
Como aperitivo me pusieron unas aceitunas aliñadas y un salchichón trufado muy rico.
Para compartir pedimos pollo aliñado a modo de ceviche. Plato fresco, original y con un toque picante.
Compartimos también estos huevos de corral a baja temperatura con jugo de asadillos y velo de tocineta.
Mi plato principal fue pieza de cerdo asada y glaseada con salsa de melón y jengibre. Plato que me recordó mucho a uno de los segundos que comí en Álbora y que aquí os enseñé.
La cena la acompañamos con un vino blanco alemán, bien fresquito, de los que tanto nos gustan, Dr. Loosen (2014)
También compartimos el postre, jugo de chocolate con helado de vainilla. Plato que me adaptaron del original que tienen en carta.
Los camareros nos parecieron muy simpáticos, cercanos y atentos. El local es muy acogedor y salimos de NÖLA muy satisfechos porque nos encantó el restaurante y su cocina. Si vais a Sigüenza, no dejéis de visitarlo.
¿Mi plato preferido? los huevos de corral, deliciosos.
RESTAURANTE NÖLA
http://www.nolarestaurante.es/
C/ Mayor 41, 19250 Sigüenza
Tel.: +34 949 39 32 46
email: nola@nolarestaurante.es
Facebook: http://www.facebook.com/nolarestaurante
Twitter: @nolasiguenza