Y terminamos ya con los resultados de la encuesta. Viene la última pregunta que está respuesta y otras que no he encontrado ninguna relación alguna. Quizá esto nos ayude un poco a entender nuestro problema.
Vamos con el tema de la genética. A la pregunta “algún familiar tiene alguna intolerancia o alergia?” el resultado me ha sorprendido y mucho.
Empecemos por explicar el 35% que ha dicho que sí. Solo el 17% tiene familiares con intolerancia a la lactosa. O lo que es lo mismo, de 58 personas solo 10 tienen familiares con los mismos problemas que ellos.
Ahora voy a explicar en 62% que ha dicho que no y diré que no es muy fiable. Por qué? Como todos sabemos, en nuestra sociedad aún no es muy conocida esta dolencia y hay mucha gente que solo considera que la leche “no le sienta bien”. Si realmente hiciéramos la prueba a todos los españoles veríamos que realmente el índice de gente que sufre en mayor o menor medida la intolerancia a la lactosa es mucho más elevado que el que conocemos. Os cuento mi propio caso: Mi abuela materna jamás tomaba productos lácteos o en muy poca cantidad porque “no le sentaba bien”. Era intolerante a la lactosa? Pues no lo sabremos nunca porque nadie le hizo la prueba, pero tiene toda la pinta. Si alguien pregunta en mi familia yo soy la única con esta intolerancia, pero a la vista está que no. Entendéis por qué no me puedo fiar de ese NO?
PREGUNTAS INCONCLUYENTES
A la pregunta sobre la dieta y el deporte fue para tratar si era un problema de falta de vida sana que podría hacer que fuera más o menos severa la enfermedad. El resultado es que da igual el ritmo de vida que llevemos, ya que no es un factor que implique validez al grado de intolerancia.
A la pregunta sobre a la peor hora que tenemos los síntomas tampoco ha salido nada claro. Por qué esta pregunta? Porque dicen que la lactosa es más fácil de digerir cuando tenemos el estómago lleno y produce menos síntomas o en menor medida. Con estos resultados queda claro que da igual que tengamos el estómago vacío o lleno, que sea de día o de noche,… no tenemos lactasa en el cuerpo, así que nuestro cuerpo no va a tolerar que dejemos pasamos ni el más mínimo de lactosa por mucho que esté envuelta en mogollón de comida.
Sobre los medicamentos puedo que decir que tampoco son un valor añadido. Tomar mucha medicación por un tiempo prolongado de tiempo puede hacernos daño al estómago e irritarlo. Mi duda surgió si alguno de estos fármacos podría acelerar o agravar el grado de intolerancia a la lactosa. Esto podría ser factible en los casos que su intolerancia no sea genética, pero como ya comenté en el Facebook me asaltó la duda de que a nadie nos han hecho una prueba genética (entiendo que porque es muy cara y que solo la podrían hacer un centro privado, de lo que no sé el precio).Por eso esta prueba queda como irrelevante e imposible de diagnosticar por uno mismo si es que solo tiene el intestino irritado por la medicación (a no ser que después de haber dejado la medicación durante unos 6 meses intente probar si puede volver a tomar lactosa, que eso ya cada uno).
Para finalizar quiero dar las gracias a todas las personas que han colaborado en este estudio del cual sé que no he respondido a ninguna de las preguntas que me asaltaban. Puse un apartado para las preguntas que tenéis vosotros y en el caso que queráis volver a participar podríamos resolver todas esas dudas. Y vuelvo a repetir que este estudio NO ES MÉDICO, no estoy diagnosticando a nadie. Si crees que tienes intolerancia a la lactosa acude a tu médico de cabecera e indícaselo.