El primer factor que no acompañó a Rapid Reload fue que en una época en la que se preferían polígonos toscos en mundos vacíos la gente no le hizo mucho caso. Y eso que el juego luce realmente bien, sin llegar al nivel de detalle, ni por asomo, de Metal Slug (tampoco PSX tenía la potencia 2D de Neo-Geo) el salto de calidad de los escenarios y sprites era realmente alto en comparación con lo que los que veníamos de Super Nintendo o Megadrive. De hecho Rapid Reload tiene ese aspecto que tanto intentan inmitar los lanzamientos "indies" con esos sprites que dejan a las claras su naturaleza pixelada pero que a su vez tienen ese toque preciosista que solo el pixel art puede dar. A mi francamente fue de los juegos que mas me entraron por los ojos cuando nos empezó a llegar el bombardeo de la revolucionaria consola de 32 bits, ni Ridge Racer ni Jumping Flash, a mi me molaba ese pequeño hijo bastardo de Gunstar Heroes.
Pero el mayor problema de Rapid Reload es precisamente parecerse tanto a Gunstar Heroes ya que en la comparación sale perdiendo de todas todas. Y eso que no es que sea un mal juego, es realmente entretenido, pero no llega ni de lejos a la redonda jugabilidad del título de Treasure. Además Media Vision cometió el pecado mortal de dejar al juego sin modo a dos jugadores, algo totalmente incomprensible y que solo achaco a las prisas o a la incapacidad del estudio de hacerlo posible en un hardware nuevo. Por muy entretenido que sea un Run & Gun en solitario este juego en particular me parecía perfecto para jugar con un colega al lado, de hecho joder, es que tiene dos personajes seleccionables con distintas armas cada uno. Justamente esa es una de las mayores gracias del título, que no es lo mismo jugar con Axel Sonics que con Ruka Hetfield (¿soy al único al que según crece los nombres que cascan los japoneses a los personajes le parecen mas y mas ridículos?).
Cada uno de los personajes tienen cuatro armas distintas que puede cambiar en cualquier momento durante la partida. Cada arma se adapta mejor a un escenario o a un tipo de enemigo y aprenderemos rápidamente a cambiarla según la circustancia, aunque es cierto que Axel tiene un arma eléctrica dirigida que es realmente "cheto" esta es poco efectiva contra los jefes de nivel, por que hace poco daño. Además la potencia de nuestros disparos la marca ese número en el centro de la parte superior de la pantalla debajo de "power". Este número está bajando constantemente y el modo de mantenerlo alto es recogiendo las píldoras de poder que nos van dejando los enemigos que nos quitamos de en medio. Como es lógico dependiendo del poder del enemigo su "píldora" nos dará mas o menos poder de disparo, es importante llevar bien cargado ese número por que aunque los "masillas" mueren fácil al llegar a los jefes (de mitad o de final de nivel) nos podemos eternizar si vamos flojos.
También tendremos la típica bomba que hace daño a todo lo de la pantalla (aunque en este juego escasean muchísimo), un item que nos dará, durante un corto periodo de tiempo, un "boost" para el poder de nuestra arma y un gancho que usaremos para llegar rápidamente a plataformas superiores. La jugabilidad es, como en todo buen arcade, vertiginosa y exigente haciendo que durante el tiempo que juguemos estemos totalmente absortos en lo que hacemos. Esto junto al buen diseño de los niveles y su variedad de situaciones hacen que las partidas a Rapid Reload sean sorprendentemente gratificantes, una buena descarga de adrenalina en esos ratos en lo que nos nos apetece jugar a nada excesivamente profundo. Pero además el juego no es TAN difícil como lo pueda ser Metal Slug y con los 10 créditos que tenemos podremos terminar el juego según nos acostumbremos a las rutinas de cada uno de los 6 niveles (bastante extensos).
Lo que no me acaba de convencer mucho es la música, no es que sea mala pero las composiciones no alcanzan el nivel de genialidad de otros títulos del género. Y el caso es que se hace notar por que la calidad del audio es bastante buena, como en muchos juegos de PSX que llegaban a tener las pistas en "audio-cd" directamente, por eso precisamente da mucha pena que no estén mas inspiradas, sobretodo teniendo en cuenta la OST que tienen otros títulos del estudio. Aun así hay que reconocer que cuando salió en su día la calidad del sonido, junto con el aspecto gráfico, encandilaba fácilmente a los amantes de los arcades, que veíamos a las nuevas consolas de 32 bits como una manera de disfrutar de los juegos de las salas recreativas en casa (sin tener que vender a tu hermano pequeño a las mafias chinas para costearse una Neo-Geo).
Rapid Reload no es un clásico del género Run & Gun pero le tengo cierto cariño a pesar de sus muchas limitaciones. Quizás por el atrevimiento de seguir potenciando los sprites en la época de los polígonos, quizás por que en mi memoria siguen esos vídeos de la Hobby Consolas o Super Juegos promocionando la primera consola de Sony, o simplemente quizás es que este tipo de juegos envejece muy bien y siempre se deja echar unas partiditas, el caso es que nunca está de mal recordar este título de Media Vision. Desgraciadamente solo ha sido relanzado para la Playstation Stores japonesa y la asiatica, así que si queréis disfrutar de la descarga de adrenalina que propone este título deberéis tirar de la emulación o comprarlo en eBay (la versión japa la podéis encontrar a muy variados precios). Si tenéis un rato muerto echarle un ojo.
@FastETC