Siempre he creído que las épocas de Navidad y verano son perfectas para hacer una revisión completa de un blog. Son fechas clave que sirven para hacer un balance de lo que hemos conseguido hasta la fecha, pero también para plantearnos qué queremos conseguir y trazar un plan para hacerlo.
Dentro de esta revisión, podemos incluir cosas como un cambio de diseño o de temáticas o un cambio total en el planteamiento del blog. Por eso, porque hoy estrenamos el mes de julio (¡Bienvenido!) y porque creo que es la época perfecta para empezar una revisión (servidora también hará lo propio con este blog), hoy te traigo un Plan de revisión de verano para tu blog. ¡Espero que te sirva!
1. En primer lugar, haz balance:
Lo fundamental para cualquier revisión, es tener una visión completa de lo que hemos hecho y conseguido hasta el momento. Hacer un balance completo de nuestro blog, nos ayudará a saber si hemos conseguido los objetivos que nos planteamos, si hemos conseguido cosas que no nos planteamos pero que han sucedido o si necesitamos cambiar cosas y definir una nueva estrategia. Si no conocemos lo que tenemos, no sabremos cómo podremos cambiar si es que lo que queremos es eso, así que yo te planteo este balance a priori que consiste en:
- Leer las entradas que has escrito de un periodo mínimo de dos meses hasta la fecha: mientras repasamos lo que hemos publicado hasta la fecha, podemos elaborar una lista de temáticas que nos permitirá saber qué temas han sido los más recurrentes. También podemos repasar qué entradas se han compartido más o cuáles han tenido más comentarios.
- Analizar las estadísticas: pararse a mirar los números de vez en cuando, es importante para saber hacia dónde va nuestro blog y empezar a encaminarlo por el camino correcto. En las estadísticas podremos ver algunas medidas clave que van desde los días que hemos recibido más visitas, hasta los posts que más y menos éxito han tenido entre nuestros lectores (a juzgar por el número de visitas de ese día o que esa misma entrada ha recibido). Intenta analizarlo todo de forma objetiva y resalta lo que creas que es más importante.
2. Lo que te gusta y lo que no:
Una vez que has hecho un balance de un periodo de tiempo en tu blog de la forma más objetiva posible, toca ponerse subjetivo. Esto es primordial porque, al final, un blog es lo que su autor quiere que sea, y para eso hace falta estar motivado, sentir que escribir en nuestro blog nos reporta algo, conocer aquello que nos llena y lo que no. Haz una lista de cosas que te gustan de tu blog y de cosas que no te gustan o que crees que podrías mejorar. Proponte mantener las primeras, y empezar a darles un giro a las segundas.
3. ¿Estás escribiendo sobre lo que te apasiona?
Ya sabéis que yo soy la loca de la pasión, de las que piensa que si algo te gusta, te mueve y es tu motor, eres capaz de cualquier cosa. Y por eso creo que un blog tiene que ser la pasión de su autor, que debe dejarse la piel (o al menos, intentarlo) en cada entrada. Pero claro, nadie se deja la piel por algo que no le importa. Plantéate si tu blog es el blog que realmente te gustaría tener, indaga en los comienzos en por qué empezaste y piensa si te sientes lo suficientemente motivado como para seguir por la línea que te has marcado hasta ahora, o es hora de cambiar de rumbo y buscar la inspiración y la motivación en otras temáticas, formas de poner tu blogging en marcha, etc.
4. Piensa en tu audiencia:
Puede que hasta ahora apenas te hayas planteado nada sobre la gente que lee tu blog, puede que incluso pienses que es tan poca gente que no merece la pena pensar en ello, pero, una de dos:
- Si consideras que el número de lectores de tu blog es pequeño: empieza a plantearte objetivos para aumentar la audiencia de tu blog (desde contenido más atractivo, hasta títulos más magnéticos, una temática realmente interesante, más actividad en tus redes sociales…)
- Si tu blog ya lo lee bastante gente: empieza a pensar en cómo puedes compensar y agradecer su confianza (crea contenido descargable y GRATUITO para tu audiencia, haz una lista de e-mailing, elabora contenido exclusivo para lectores o realizar algún tipo de actividad especial como un sorteo, un vídeo, etc). ¡Imaginación al poder!
5. ¿Qué objetivos quieres conseguir?
Como quien inicia una nueva temporada o época en el trabajo, intenta ponerte una lista de objetivos (realistas, pero ambiciosos) que te gustaría conseguir con tu blog. Algunos de esos objetivos pueden ser:
- Cerrrar el año con más visitas que el año anterior.
- Cambiar de diseño.
- Pasarme a un dominio .com
- Empezar a vender servicios / productos online.
- Publicar al menos 3 posts en semana durante X tiempo.
Como ves, los objetivos que te plantees con tu blog pueden ser muchos y muy variados. Para que sean realmente unos objetivos que merezca la pena seguir, plantéatelos como un reto personal, como algo que realmente quieres luchar por conseguir. Piensa en tu blog ideal, y después, en la manera de conseguirlo..
6. Ten en cuenta, además:
Algunas cosas que, además de las 5 que ya hemos enumerado, puedes tener en cuenta a la hora de hacer la revisión de tu blog, son:
- La forma en la que están escritas tus entradas. Cada palabra cuenta.
- La manera en la que puedes dar un paso más allá con tu blog. ¡Pasa al siguiente nivel!
- Definir el nicho de tu blog, puede ser clave para diferenciarte. ¡Empieza ya!
Ahora te toca a ti ;) Hazle la revisión de verano a tu blog y plantéate nuevos objetivos para la “nueva temporada”.
¡Feliz julio!
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