El otro día vi que en mi pescadería habitual vendían erizos, así que me animé a comprar un kilo y a preparar un sencillo revuelto en casa. A todos nos gustó un montón, así que pienso repetir en otras ocasiones.
Como nunca los había preparado, no tenía ni idea de cómo se abrían, pero recordé haber visto una receta con erizos en donde explicaban cómo había que hacer. Aquí os dejo el enlace del blog La cocina de las Casinas, para que veáis cómo se abren y, de paso, echéis un ojo a la receta que nos propone este blog, que seguro está deliciosa y, como no, al resto de las recetas que contiene, porque son una maravilla y las fotos que las acompañan son preciosas.
El erizo de mar (en Galicia, se le denomina ourizo de mar, en Asturias y Cantabria es conocido como oricio) pertenece a la familia de los equinodermos. Su forma es parecida a la de un globo, está cubierto de espinas y su esqueleto es interno. Las púas que cubren el exterior de su organismo son móviles y les permite moverse por el fondo marino. Suelen medir entre 5 y 8 cm. de diámetro y su cuerpo puede ser de color marrón, verde o lila-violeta intenso.
Los erizos de mar tienen una larga historia gastronómica, pues ya eran consumidos en la antigüedad, encontrándose restos de caparazones de erizo en la conocidísima Pompeya.
La temporada del erizo va de enero a abril, pero en los meses de enero y febrero es cuando están mejor, ya que le crecen las gónadas (los órganos sexuales) que es lo que constituye su parte comestible.
Como cualquier marisco, debe consumirse muy fresco, si es posible, mejor el día en que los compramos.
- 1 kilo de erizos
- 3 dientes de ajo
- Sal
- Aceite de oliva
- 7 huevos