Antes de comenzar, permítanme compartir algo con ustedes relacionado con la enfermedad que padezco, ya que este blog nació por ese motivo: vivencias, experiencias y adaptación alimenticia a la enfermedad. Hoy es de esos días en los que el cuerpo me duele y me siento cansada, con motivo. Hace años no podía relacionar los dolores y el cansancio con nada. A día de hoy sé que forma parte de mi salud, por decirlo llanamente. Unos días me siento más activa y otros menos. Debo reconocer que durante años, a pesar del cansancio, dolores,... seguía adelante y no me paraba, cosa que resultaba vital para mi cuerpo, el escucharlo, ¡claro! Hoy intento dedicarle tiempo para que se reponga, así yo también puedo continuar. Simplemente con aceptación, sin prisas y sin mayor apuro. Las cosas son como son y no hay más, simplemente aceptar.
Hay días que puedo hacer muchas cosas y otros, menos. Y todo está bien. Resulta difícil transmitir esto a los que te rodean. Algunos, con sus esquemas, entienden cosas que ni has intentado expresar porque no forman parte de ti. Eso me ha aportado mucho. Me ha enseñado a mirar y ver a la persona que tengo enfrente o, por lo menos, intentarlo. Me ha parecido importante compartir con ustedes cómo me sentía hoy, ya que un enfermo de crohn (http://es.wikipedia.org/wiki/Enfermedad_de_Crohn), colitis, proctitis,... no siempre se encuentra en buenas condiciones aunque no padezca, en ese momento, un brote activo de la enfermedad.
Vamos a ponernos manos a la obra con la cocina. Días atrás, una seguidora del blog me comentó que le gustaban mucho las recetas pero que la dieta no le permitía comer el arroz o las magdalenas. Habitualmente preparo carne o pescado a la plancha y verduras. Las recetas resultan de lo más simple y sencillas. Tal vez, a pesar de la simplicidad, pueda agradarle a algun@ de ustedes. Con el delantal puesto y el pelo recogido, comienzo a preparar estas veduritas de hoy.
INGREDIENTES para 2 personas: 1 calabacín o bubango, 1 cebolla, 1 apio, 1 zanahoria, 3 huevos, sal, ajo en polvo, hierbas al gusto.
ELABORACIÓN CONVENCIONAL: trocear toda la verdura al gusto. A mí me suele gustar el apio en tiras y si la hago la en la Thermomix, pues la pico grande para que no se deshaga. Una vez cortada, añadimos aceite a la sartén, acto seguido incorporamos la cebolla, el apio y vamos dorando. Luego la zanahoria y en último lugar el calabacín. Pochamos muy bien o dejamos al dente según nos agrade más y aderezamos al gusto con el ajo, hierbas y sal (si pueden tomar pimienta, pues también). Cuando estén las verduras rehogaditas, vertemos los huevos bien batidos. Yo añadí dos y los cuajé. Al final separé la sartén del fuego para incorporar el tercer huevo y que no se cuajara del todo. Me gusta que quede un poco jugoso.
ELABORACIÓN EN THERMOMIX: calentamos unos 4 minutos y 30 segundos el aceite a velocidad 1-2, temperatura varoma. Transcurrido este tiempo, añadimos el apio, cebolla y zanahoria. Seguimos con la misma velocidad, tiempo y temperatura. Cuando transcurran el tiempo, abrimos, removemos (para bajar aquellos trozos que estén en las paredes) e incorporamos el calabacín o bubango y aderezamos con sal, ajo en polvo, hierbas y lo que les apetezca. Programamos 5 minutos más, misma temperatura y velocidad. En ningún momento colocar el cubilete. Finalmente, dejamos caer por el agujero central de la tapa dos huevo, temperatura 37º, removemos durante 2 minutos y velocidad 1. El último huevo estará 40 segundos a esa temperatura mínima, momento en el que se parará y ya estará para mi gusto.
Si quieren que se cuajen bien los huevos, no hará falta batir 2 y 1 e incorporarlos en momentos diferentes. Con que los batan juntos y lo hagan todo al mismo tiempo, bastará. También puede darse el caso de que les guste más jugoso. Hacemos lo mismo, batir los 3 huevos juntos y darle poco tiempo, tanto en sartén como en thermomix. Enviar por correo electrónicoEscribe un blogCompartir con TwitterCompartir con Facebook
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- Rosa
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- VERDURAS