Rezar, comer, amar. ¿Respuestas o preguntas?

Publicado el 14 noviembre 2010 por Cinehólico

Debemos estar preparados para las oleadas de transformación. Debemos aceptar el hecho que como parte de este mundo cambiante, nosotros, todos,siempre; cambiamos.

El viaje que Liz (Julia Roberts) inicia desde su mente y que materializa en un rico y exuberante itinerario plagado de comida, sensaciones y novedades, es el que todos, de cuando en cuando, realizamos muy a nuestro pesar. Porque cambiar es uno de los estados más desapacibles que nos aterra.

El miedo a perder el piso, así sea un basamento triste y desgraciado, es el que nos da la sensación de seguridad. Nos hace creer que estamos bien. ¿Para qué volver a empezar si hemos invertido tanto de nuestras vidas en lo que hemos construido? ¿Para que ensayar cosas nuevas si ya hemos aprendido a movernos con lo que tenemos? Para que abandonarnos de quien ha estado a nuestro lado por tanto tiempo? ¿La razón? O mejor hablar de razones, es porque necesitamos estar satisfechos consigo mismos para poder disfrutar y dar goce a los otros, poder engullir y saborear el mundo y a la vida a la que llegamos sin manual y sin boleto de regreso.

Julia Roberts sale airosa y quienes la acompañan como turistas accidentales al mejor estilo de la escritora Anne Tyler (Billy Crudup, James Franco, Javier Bardem) dan el tono que suma a cada paso en este rico universo femenino tan completo que sobrepasa las barreras de género para hablar del universal deseo de bienestar que todos anhelamos alcanzar.

El director Ryan Murphy es el responsable de esta decorosa adaptación (2010) del best sellers de la escritora Elizabeth Gilbert.