Ricota asada

Por Bouquetgarni
Sé muy bien que es lunes y que hoy no suele ser día de publicación por aquí; pero, la semana pasada he tenido tanto problema y tanta cosa que no he llegado con tiempo a poder traerles la receta de costumbre. Por tanto, aquí estamos: En lunes, comenzando la semana y con una preparación que, estoy segura, les resultará muy práctica y versátil.
La ricota/requesón es, sin dudas, un noble producto, apto tanto como ingrediente de platos salados como dulces, con una versatilidad para destacar. Las hay más o menos cremosas, con más o menos textura y densidad; pero, en todo caso - y más aún, tratándose de productos de buena o reconocida calidad; ni hablar de ricota/requesón casera - siempre rendidoras y a la altura de las expectativas. De mi lado italiano de la familia, este ingrediente es un clásico destacado en muchas preparaciones. De hecho, mi madre es tan fanática de la ricota/requesón que puede comerla así, a cucharadas, o untada en tostadas y feliz de la vida. Por eso, hoy quiero compartir con ustedes una receta de familia de toda la vida, ideal como entrada/entrante, guarnición/acompañamiento o como plato principal (junto con una buena ensalada variada) con todas las de la ley.

Se trata de una preparación muy sencilla, rendidora y, podría decirse, de aprovechamiento porque podemos enriquecerla con cuanto ingrediente se les ocurra y encuentren en casa. Hoy les daré mi receta básica y algunas sugerencias o posibilidades para preparar distintas variantes de ella sin mayores pretensiones que obtener un plato de origen, rendidor, sabroso y nutritivo.

Ya mismo nos ponemos a trabajar porque más simple que esto casi no hay ;)
En primer lugar, pondremos en un colador de malla cerrada 500 gramos de ricota/requesón (yo utilizo descremada, pero eso es a gusto de cada quien) y la dejamos allí por un rato para que escurra todo el suero que pudiera contener. Mientras tanto, en 1 cucharada de aceite de coco (puede ser el aceite de su preferencia) salteamos 3 puerros picados hasta dorarlos ligeramente.

Entonces, en un bol mezclamos la ricota/requesón bien escurrida junto con los puerros salteados y le añadimos 1 taza de queso rallado (el de su gusto; yo utilicé Provolone) y 2-3 huevos (pastoriles/de campo/ecológicos) ligeramente batidos.

Por último, añadimos sal (en poca cantidad porque el queso rallado ya tiene bastante), pimienta y nuez moscada recién molidas y 1 cucharadita de estragón (no se excedan porque tiene un sabor un poco invasivo).
Disponemos la mezcla en un molde apto para horno, previamente humedecido con rocío vegetal (puede, en su lugar, untarse con manteca o pincelarse con aceite) y la cocemos en un horno moderado a fuerte hasta que los huevos cuajen, la superficie tome un tentador color dorado y los bordes se separen del recipiente que la contiene. Servimos caliente o tibia, acompañada de una surtida ensalada de hojas verdes, tomates cherry, brotes de berro y croutons/picatostes. 
Fácil, completa, versátil, sabrosa y sustanciosa... ¡¿No sé qué más se puede pedir de una receta?! 

Algunas observaciones y recomendaciones finales: Estas cantidades rinden para 3-4 porciones, pudiendo ser indicada para un número mayor de comensales en caso de utilizar esta preparacióncomo guarnición/acompañamiento o complemento del plato de su gusto.
Si así lo desean, pueden acompañar con un chutney de cebollas moradas/rojas y manzanas o ciruelas que le aportará un contraste delicado, a la vez que interesante. También pueden servirla con vegetales asados o grillados, logrando un plato muy saludable y completo.
A esta receta básica pueden incorporarle vegetales salteados (berenjenas, zapallitos redondos, zucchinis/calabacines, espinacas, acelga, kale/berza, berros, champiñones de París, hongos Portobello y/o shiitake, tomates y cebollas confitados...), calabaza en cubos o en puré, tomates secos rehidratados en aceite, maíz o arvejas/guisantes verdes...
Entretanto, si así lo desean, pueden añadir mozzarella rallada o trocitos de queso fresco para que, al derretirse, logren una textura más cremosa
Asimismo, pueden incorporar orégano, romero y tomillo frescos bien picados, mostaza en grano molida, pimentón dulce o dulce ahumado... para aportar distintos sabores a la preparación.

Pues, como ven, se trata de una receta básica; de ésas que nos pueden sacar de un apuro, nos inspiran nuevas preparaciones o nos recuerdan platos de abuelas y bisabuelas. Una cocina sencilla, poco pretenciosa, donde lo que más se luce es el producto o ingrediente noble que podemos enriquecer con algunos sabores que nunca fallan y dejan a todo mundo contento ;)

Espero que les guste mi receta y que la prueben en sus hogares. A propósito de ello, les cuento un secreto: En casa se la devoran cuando la preparo (en cualquiera de sus versiones) porque son muy amantes de la ricota/requesón y de toda receta que la cuente como ingrediente principal. Bueno, en tren de confesiones, debo admitir que a mí también me gusta muchísimo porque me permite mucho juego a la hora de cocina; sin embargo, por razones de salud no puedo comerla todo lo que me gustaría... Creo que está claro que en mi familia esto del placer por la ricota/requesón lo llevamos en la sangre Jajaja :D
Nos reencontramos el jueves, como de costumbre (aquí estaré esperándoles). Hasta entonces, les deseo una gran semana. Disfruten junto a sus seres queridos y no olviden experimentar en la cocina, que siempre algo bueno sale de allí ;)
Textos y fotografías: ©Bouquet Garni Recetas
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