Pero lo que nos ha encantado de esta acción es que se ha hecho un teatro de una cosa bien distinta: la vida en el siglo XVII. El Rijksmuseum, un museo muy popular en los Países Bajos (patrocinado por ING Direct) hizo una acción en el que los visitantes de un centro comercial, de repente, eran partícipes de situaciones típicas que ocurrían en esta época. Bajo la historia de que un ladrón hace de las suyas y es capturado, guardias, aristócratas, señoritas, granjeras e incluso enanos, irrumpen de golpe el centro para promocionar la reapertura de dicho museo.
El éxito de la acción no hay que dudar que radica en el factor sorpresa, en la simpatía y buena construcción de la historia y en la puesta final de la escena, donde un marco de un cuadro encierra a todos los personajes y los devuelve otra vez al lienzo.
Sin duda es toda una delicia de acción para los amantes de la historia y del arte.
Ejemplo visto en: Creative Criminals