Yo no se ustedes, pero estoy notando al personal en general un poco arizco, no se si será por el frío (tranquilos que aquí en Sevilla no dura más de un mes) o por la crisis, pero a la mínima que intentas hacer una gracia o una bromita, no cae bien, sea por lo que sea. Y no hablo del típico cansino que está todo el día ahí pim pim, al que siempre le acabas diciendo "¿Quillo yastá no?". Sino lo típico que te sale así de repente... pues cuidado que hay que andar con piés de plomo. El número de malajes está aumentando exponencialmente una barbaridad. No se, parece que está todo el mundo a la defensiva a la mínima... "tranquilo cojone!" vamos a relajarnos y a disfrutar; y aunque no tengamos pasta, que eso ha sido siempre así; para algo vivimos en el sur de España, y si por algo se nos caracteriza es por ser como somos.
Os mantendré informados del avance del conflicto.