Evitando sobresaltos e imponiendo jerarquía, River superó la prueba que le supuso enfrentarse a Sportivo Belgrano de San Francisco y de la provincia de Catamarca se llevó un triunfo que en medio de la disputa en la cual se encuentra por retornar a Primera División le permite seguir soñando con conquistar la Copa Argentina.
Aunque de a ratos lució incomodo y sufrió al momento de encontrar lucidez, River justificó de forma amplia su victoria (2-0), siendo un equipo que en igualdad de condiciones no perdió la compostura y que en ventaja gracias al gol de Martin Aguirre y ya con mayor tranquilidad resolvió el trámite con seguridad y solvencia.
En el marco de un equipo que se presentó sin sus grandes figuras y en el que tuvieron la posibilidad de jugar quienes habitualmente gozan de menos minutos, uno de los que mejor aprovechó su chance fue justamente Aguirre, quien por convertir el gol que abrió un encuentro hasta entonces cerrado y también por dar muestras de un encomiable despliegue, recuperar muchos balones y ser iniciador de varias maniobras fue la gran figura de la cancha.
Otro de los que tuvo un muy buen nivel fue Daniel “Keko” Villalva, quien hasta que se cansó gravitó muchísimo desde su posición de volante izquierdo, mostrándose movedizo y participativo y desequilibrando en base a movilidad, desbordes y diagonales.
Menos regulares, Rogelio Funes Mori y David Trezeguet también dejaron detalles interesantes, el primero exhibiéndose agil, echándose unos metros atrás, siendo alternativa de descarga permanente y sentenciando el choque con un gran gol y el segundo pivoteando muy bien y generándose hasta cuatro opciones claras que no transformó en gol por no encontrarse fino en la definición.
Siendo Nicolas Domingo y Cristian Ledesma los que seguramente menos rindieron, lo que Matias Almeyda pudo corroborar es que para algunos de los puestos claves de la cancha dispone de futbolistas que aunque no actúen regularmente pueden serle de mucha utilidad de cara al futuro inmediato, lo cual seguramente lo haya dejado tan tranquilo como la clasificación a octavos de final.